El Gobierno español abandona la solidaridad internacional con un recorte en la ayuda al desarrollo del 73 % - Alfa y Omega

El Gobierno español abandona la solidaridad internacional con un recorte en la ayuda al desarrollo del 73 %

El nuevo descenso la sitúa en un mínimo histórico: en el 0,12 % de la Renta Nacional Bruta –RNB– y en el puesto 26 de 28 países donantes. En un momento con las mayores emergencias humanitarias, con hambrunas y más de 65 millones de personas desplazadas, la partida de Acción Humanitaria sufre una caída de un 85,4 % desde 2009 hasta 2015. La Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo –AECID–, principal ejecutora de la Ayuda Oficial al Desarrollo –AOD–, sólo gestiona el 15,7 % de la misma. Oxfam Intermón pide la refundación de la política de cooperación con recursos suficientes, hasta alcanzar el 0,4 % de la RNB en 2020, y una nueva estructura que responda a los retos globales

Oxfam Intermón

Desde 2008 y por sexto año, la partida destinada a la Ayuda Oficial al Desarrollo vuelve a bajar. Este nuevo recorte la deja en un mínimo histórico: en el 0,12 por ciento de la RNB y con un descenso acumulado de sus fondos desde 2008 hasta 2015 del 73,5 %. Ante esta situación de «colapso» de la política pública de cooperación, Oxfam Intermón pide una «refundación» de la misma, tal y como se desprende de su informe anual La Realidad de la Ayuda presentado hoy.

«La cooperación española se encuentra en caída libre. Está tocada y casi hundida. Tras dos años de crecimiento económico, excusarse en la situación económica de poco sirve ya. La falta de voluntad y liderazgo políticos, la arrastra hacia un camino de no retorno. La única solución posible es que se refunde de manera que responda a los retos globales de lucha contra la pobreza y la desigualdad y lograr un mundo más sostenible», ha señalado el director general de Oxfam Intermón, José María Vera, en la presentación.

La situación es aún más grave si el análisis se centra en el presupuesto destinado a la Acción Humanitaria. En un momento con las mayores necesidades humanitarias en 70 años, en el que más de 128,6 millones de personas en el mundo están en situación de emergencia, España ha recortado esta partida desde 2009 hasta 2015 en un 85,4 %.

«El recorte deja esta partida en una cantidad irrisoria para responder a las crisis humanitarias. Esta ayuda es vital para la supervivencia de millones de personas. En un contexto, sin precedentes en la historia con la declaración de hambruna por la ONU en Sudán Sur, la amenaza de tres más en Yemen, Somalia y Nigeria, con 20 millones de personas en riesgo de hambruna y más de 65 millones de personas desplazadas huyendo de la pobreza y los conflictos, es vergonzoso que España apenas dedique 46,6 millones de euros», según Vera.

«Menos incluso de los ya paupérrimos 56,8 millones que se destinaron en 2014», ha detallado el director general en el acto, en el que también han asistido el secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica, Fernando García Casas, y la representante de la Junta de la Coordinadora de ONG para el Desarrollo –CONGD– Marta Iglesias.

Necesario compromiso para la población desplazada

Un tratamiento especial merece el reto del desplazamiento global. El informe detalla cómo esta crisis mundial continúa enquistada sin apenas avances en la definición de una respuesta adecuada e integral que asegure los derechos humanos de los refugiados.

A modo de ejemplo de esta falta de compromiso, de los 17.387 refugiados que España se comprometió a acoger de acuerdo al sistema de cuotas definido en 2015 por la Comisión Europea, apenas ha acogido a 1.167, representando tan sólo un 6,7 %. El plazo finaliza en septiembre de 2017. Además, desde octubre del año pasado no han llegado más cupos de refugiados a través del mecanismo de reasentamiento.

«El Gobierno español ha mostrado una evidente falta de sensibilidad ante la crisis. Debe cumplir sus compromisos de reasentamiento y reubicación de refugiados y aumentar significativamente su cuota. Además, debe excluir del cómputo de la AOD los gastos domésticos de acogida, ya que la ayuda debe dedicarse a la lucha contra la pobreza y la desigualdad de y en los países en desarrollo», según Vera.

Solo 1 de cada 4 euros para el MAEC-AECID

Asimismo, La Realidad de la Ayuda hace un balance negativo no sólo de la cantidad de recursos asignados a la AOD sino de la manera cómo se están distribuyendo. Del volumen total de la ayuda, que ascendió en 2015 a 1.261 millones de euros, el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación –MAEC– solo gestionó el 24 %. En la AECID sólo recae el 15,7 %. En resumidas cuentas, el principal organismo ejecutor de la política de cooperación española apenas dispone de 178 millones de euros para ejecutar lo que debería ser el grueso de la Cooperación Internacional para el Desarrollo.

El 64 por ciento de la AOD lo gestiona el resto de ministerios, aglutinando solo el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas y el de Economía y Competitividad más del 60 % de la ayuda española, que se dedica principalmente a contribuciones obligatorias a la UE y organismos internacionales.

Para Vera, «esta tendencia se debe revertir para asegurar que España cuenta con una cooperación bilateral relevante y una contribución a los organismos internacionales alineada con el valor añadido que puede aportar, así como alineada con la bilateral ejecutada por la AECID».

Mejoría en la descentralizada

La excepción en esta tendencia de recortes la protagoniza la ayuda descentralizada. El cambio político vivido en distintos gobiernos autonómicos y locales tras las elecciones de mayo 2015 se dejó sentir en la partida de cooperación, con un aumento del 18 % y del 11 % en el ámbito autonómico y local, respectivamente. Tras un recorte del 43 % entre 2011 y 2014, las Comunidades Autonómicas aumentaron en 2015 su AOD en 20 millones de euros.

Oportunidad para cambiar el rumbo

Ante este escenario, «España necesita –continúa el director general– dar un giro de 180 grados, impulsando la ayuda y comprometiéndose con la agenda de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) acordados con las Naciones Unidas para recuperar el compromiso solidario y devolver la credibilidad e influencia a nuestro país». Tras años de recortes, España se sitúa a la cola –puesto 26 de 28– como Estado donante del Comité de Ayuda al Desarrollo –CAD–, solo superado por Eslovaquia y Polonia. Seis años antes, ocupaba el puesto 11º, dedicando a la AOD el 0,46 % de su RNB.

En este sentido, el informe detalla propuestas y recomendaciones para cambiar el rumbo de la cooperación española como la definición de una política con recursos suficientes, que recupere progresivamente los fondos hasta alcanzar el 0,4 % de la RNB en 2020, y una planificación estratégica que responda a los retos globales y busque un valor añadido frente al resto de donantes.

Además de diseñar una propuesta de nueva estructura de la cooperación con liderazgo político y capacidad operativa que garantice la nueva agenda del desarrollo sostenible derivada de los ODS.

«El equipo con el que cuenta el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación tiene un gran reto pero también la experiencia, equipos profesionales en los países y el conocimiento para llevar a cabo este proceso de refundación», añade Vera. Al respecto, Marta Iglesias, de la CONGD afirma que «este cambio será coherente con el apoyo que la ciudadanía ofrece a la cooperación. Según datos de nuestro informe, 2,4 millones de personas apoyan de alguna manera a las ONG, un 20 % más que en 2008».

«Héroes y heroínas de la Ayuda»

Gracias a la cooperación, millones de personas en el mundo han transformado sus vidas. Tras este primer impulso, ahora son «héroes y heroínas», que contribuyen a cambiar también sus comunidades luchando contra la desigualdad como Patricia Gómez, responsable de Poder Social Ciudad Alternativa de República Dominicana, y Saida Aitbihi, defensora de los derechos de las mujeres de Marruecos. Al igual que Mamadou Dieng, líder campesino de Mauritania, que aboga por la necesidad de invertir en sistemas agrícolas y Jasem AL-Wrewir, refugiado sirio que vive en el campo jordano de Zaatari desde 2013.

Ellos son los protagonistas del proyecto de Oxfam Intermón Héroes de la Ayuda, que se ha presentado también en el acto. A través de esta iniciativa, los diputados Elena Bastidas (PP), Meritxell Batet (PSC), Ione Belarra (Podemos) y Luis Salvador (Ciudadanos) conocieron de la mano Mamadou en Mauritania, de Jasem en Jordania, de Patricia en República Dominicana y Saida de Marruecos cómo la AOD contribuye a que muchas personas puedan mejorar sus condiciones de vida.

Tras los viajes, todos los grupos parlamentarios que han viajado se han comprometido firmemente en el acto con el incremento al 0,4 % de la AOD al término de la actual legislatura. El grupo parlamentario socialista, de Unidos Podemos y de Ciudadanos además trabajarán para garantizar la defensa de los derechos de los refugiados como lo han hecho a través de proposiciones no de ley.

«Para conseguir que millones de personas como Patricia, Mamadou, Jasem y Saida transformen sus vidas y contribuya al cambio global es necesario que el gobierno español tenga la sensibilidad y voluntad política para adoptar compromisos firmes y concretos para construir una verdadera política de cooperación que ponga a las personas más vulnerables en el centro», ha concluido Vera.

Otros datos relevantes de La Realidad de la Ayuda 2017:

  • El recorte de la AOD de 2015 fue casi del 11 % con respecto a los datos del 2014. La ayuda es hoy una tercera parte de lo que era en 2008 –4,762 millones de euros–.
  • Ante el escenario internacional actual, con las mayores emergencias humanitarias en 70 años con hambrunas y más de 65 millones de personas desplazadas es necesaria una ayuda humanitaria con más fuerza presupuestaria: al menos 150 millones de euros en 2017, y tender al 10 % de la AOD total en 2020.
  • Las Comunidades Autónomas deberán haber recuperado en 2020 niveles parecidos a los alcanzados en los años 2000, rondando los 450 millones de euros y el 0,25 % de su presupuesto de gastos.
  • Más de la mitad del incremento de la ayuda descentralizada se debe al esfuerzo realizado por Andalucía, que recupera el primer puesto en el escalafón autonómico. Pierde el liderazgo el País Vasco, cuya AOD se reduce un 10 % –casi 4 millones de euros–. Sube Cataluña, Baleares y Extremadura y se estancan Valencia y Castilla La Mancha. La Comunidad de Madrid registra una AOD neta negativa (reembolsos superiores a los desembolsos).
  • Con 118,4 millones de euros, Cuba encabeza el ranking de países receptores de AOD española en 2015. De los 10 mayores receptores, 9 son Países Asociación, siendo Siria el único no prioritario que se cuela en el top 10.

Todos estos datos se pueden ver actualizados en la plataforma web de transparencia y vigilancia ciudadana sobre cooperación al desarrollo (www.RealidadAyuda.org).