La pastoral de la sonrisa - Alfa y Omega

La pastoral de la sonrisa

Señor, ¿qué mandáis hacer de mí? Esta expresión de santa Teresa es el lema elegido para el Día del Seminario 2015. «La mejor pastoral vocacional es la alegría de un seminarista», aseguró monseñor Osoro en la presentación de la Campaña en el Seminario de Madrid

José Calderero de Aldecoa
En el Seminario Conciliar de Madrid…

El Seminario Conciliar de Madrid acogió, el 25 de febrero, la presentación de la Campaña para el Día del Seminario 2015, que lleva por lema Señor, ¿qué mandáis hacer de mí? El acto comenzó con el encuentro anual de la Cadena de oración por las vocaciones, de la que forman parte 4.300 miembros. «El Señor nos pidió que rezásemos para que enviara obreros a su mies y, de hecho, comprobamos que los manda», aseguró allí el arzobispo de Madrid, monseñor Carlos Osoro.

En sus primeros encuentros con los sacerdotes de Madrid, el nuevo arzobispo siempre terminaba dando su teléfono móvil «por si tenéis algún joven que se esté planteando la vocación y al que yo pueda llamar», decía. Y añadía: «Ya he hablado con algunos para animarlos a hacer el curso preparatorio».

La pastoral vocacional ha sido siempre una de sus prioridades. En todas las diócesis por las que ha pasado, ha puesto en marcha un Seminario Menor. En Madrid, la situación es otra: en 2014, era la diócesis española con más seminaristas. «Esto quiere decir que en nuestra Iglesia diocesana hay vida», aseguró el obispo.

Tras el encuentro de la Cadena de oración, se escucharon, entre otros, los testimonios de Fernando y Alberto, seminarista mayor y menor respectivamente. «Hay gozos, a veces hay arideces, hay momentos de preguntas, pero siempre se experimenta la gracia del Señor, (…) sobre todo, dando mucha importancia a la oración», explicó Fernando. Alberto, en su intervención, recordó la pregunta que se ha hecho muchas veces: ¿Puede un muchacho de 12 años querer ser sacerdote? «Es una pregunta preciosa. La gente se cree que esto es cosa de mayores. Y lo creen porque no entienden que estamos en este mundo por la gracia de Dios. El Señor nos puede llamar en cualquier momento, circunstancia, y edad», aseguró el obispo.

Cartel del Día del Seminario

Espejos de Cristo

En su intervención, don Carlos aseguró que «está naciendo una nueva época», a la que «tenemos que aportar». El prelado recordó la figura de san Juan Pablo II y sus palabras sobre lo que tenía que hacer la Iglesia de cara al tercer milenio: «Ser santos». Y añadió: «Cuando ponemos nuestras vidas en manos del Señor, necesariamente nos tenemos que hacer la misma pregunta que se hizo santa Teresa: ¿Qué mandáis hacer de mí? Hay muchísimos jóvenes que se pueden hacer esta misma pregunta, y la respuesta es la misma que la de la Doctora de Ávila: Aquí me tienes, Señor».

La presentación de la Campaña terminó con la Eucaristía, presidida por monseñor Osoro. Durante la homilía, afirmó que «los seminaristas, como los cristianos, hemos de ser espejos de Cristo, transparentes para que el mundo vea». También insistió en la importancia de no dejarse llevar por la tristeza: «La mejor pastoral vocacional es la alegría de un seminarista».