Un clásico de la doctrina social - Alfa y Omega

Un clásico de la doctrina social

José Francisco Serrano Oceja

No es frecuente que la lectura de un libro pueda, y quizá deba, comenzarse por el final. El principio es el principio, aunque sea una tautología. Sin embargo, tenemos aquí un caso distinto por el hecho de que el autor ha añadido un último capítulo, a modo de apéndice, sobre el giro del pontificado del Papa Francisco que, sin lugar a dudas, hará las delicias de los lectores. Esta Introducción a la doctrina social de la Iglesia, del jesuita italiano Bartolomeo Sorge, era considerada, desde hace no poco tiempo, como un texto de referencia, un clásico de la pedagogía sobre esta siempre sugerente materia. Un sinfín de grupos, comunidades, asociaciones, se han formado en la lectura, la discusión, el debate, la profundización del contenido de este volumen que en su primigenia factura recogía las lecciones dictadas por el autor en el Instituto de Formación política Pedro Arrupe de Palermo.

Desde la fecha inicial de su publicación en 1966 hasta el presente ha llovido mucho. La puesta al día fue necesaria y no solo por la aparición del Compendio de la doctrina social de la Iglesia, del Catecismo de la Iglesia católica, sino por el amplio magisterio pontificio que se iba acumulando en este arco de contemporaneidad. Y esta acumulación de capas, de estratos de reflexión y aportación magisterial, y de experiencia en la contingencia histórica del tiempo, se percibe en este libro, que no se pierde en erudiciones innecesarias y que, con un estilo personal y un género aceptable para el público, ofrece los contenidos esenciales en contexto. Bien es cierto que también hay que advertir que su contexto vital es la experiencia de Iglesia en Italia, y eso se nota especialmente en varios de sus capítulos, por ejemplo el dedicado al silencio de los obispos sobre Italia. Pero la riqueza de esta introducción radica en su clara estructura pedagógica en cuatro partes: el discurso social de la Iglesia, en la que prima lo histórico; la propuesta social de la Iglesia, sistematización de los conceptos principales; la presencia social de la Iglesia, un cuadro detallado de los principios de actuación política, y los debates de actualidad, o las cuestiones macro y micro prioritarias en ámbitos de referencia, entre los que se encuentran los temas de la globalización, la guerra, las biotecnologías, la pena de muerte, el terrorismo, el islam, la crisis económica o la ecología integral.

Llegamos al final, a la reflexión sobre la línea montiniana del Papa Francisco y al giro del pontificado a partir del cambio de método, del deductivo de los anteriores al inductivo de la actual época inmersa en el espíritu sinodal. Lo que hace afirmar al autor que «Juan Pablo II y Benedicto XVI se preocuparon más de salvaguardar la continuidad con el pasado que de afrontar las nuevas perspectivas abiertas por el Concilio. Ello condujo, de hecho, a la congelación del camino de renovación emprendido por Pablo VI y a la consiguiente normalización de la vida eclesial, que se prolongó durante 35 años […]. La línea pastoral montiniana, por tanto, era muy diferente de la línea de presencia instaurada por Juan Pablo II y proseguida por Benedicto XVI».

Introducción a la doctrina social de la Iglesia
Autor:

Bartolomeo Sorge

Editorial:

Sal Terrae