«No es un ojalá. Los cristianos de Nínive queremos volver a casa»

«El 6 de agosto de 2014 fue un día negro en nuestra vida», cuenta el sacerdote iraquí Naim Shoshandy. Los cristianos de Qaraqosh se despertaron a las cinco de la madrugada por el sonido de las bombas y los combates entre el Daesh y los peshmerga kurdos. Fue el día que la Llanura de Nínive se vació de cristianos.

Desde entonces han pasado «tres años muy duros, pero poco a poco vamos a reconstruir nuestras vidas porque aunque hemos perdido todo, tenemos una fe muy grande en Jesucristo», ha afirmado el sacerdote al presentar este miércoles la campaña Ayúdales a volver de Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN por sus siglas en inglés). «La vuelta a Nínive es difícil, pero los cristianos quieren volver», y tener una casa en la que poner un árbol y un belén por Navidad.

Ese cálido día de agosto de hace tres años, las familias comenzaron a abandonar Qaraqosh cuando «una bomba cayó muy cerca de mi casa. Murió una chica de 25 años, y dos niños que jugaban en la calle. Fue un gran sufrimiento dejar atrás toda tu vida, sin saber dónde vas». El padre Naim se ha emocionado al recordar la primera noche en que vio a sus feligreses dormir en la calle, en Erbil (Kurdistán iraquí).

La cruz y el rosario

Silencioso durante varios minutos, solo ha recuperado la fuerza al mostrar un crucifijo y un rosario. Los dos únicos objetos, junto con un icono de la Virgen, que cogió al salir por última vez de su habitación, a las dos de la madrugada siguiente. «Todos dejamos nuestra ciudad por esta cruz. Y [el rosario] es nuestra arma, pero no para matar a otras personas».

Tener que abandonar la Llanura de Nínive fue un golpe más para el joven sacerdote: «Tengo 34 años, y desde que nací guerras, guerras y guerras. Mi hermano Raid había sido asesinado años antes en Mosul. Un día al salir de casa le dispararon por ser cristiano. Fue un duro golpe pero gracias a Dios aprendí a perdonar, aunque me llevó mucho tiempo».

El padre Naim ha pasado parte de los últimos tres años con su madre, sus hermanas y feligreses en Erbil. Ahora, está temporalmente en España, completando sus estudios. «Alguna vez me han preguntado que por qué no me traigo a mi madre conmigo, aquí. Pero ella dice que no, que Irak es su tierra». Espera que, pronto, pueda volver a casa.

«¿Dónde está mi ciudad?»

Con Ayúdales a volver, ACN España pretende contribuir a reconstruir 13.088 casas de familias cristianas –1.234 de ellas totalmente destrozadas– y 363 construcciones de la Iglesia: templos, conventos, colegios, dispensarios…

«Cuando se supo que Qaraqosh había sido liberada, en el barrio cristiano de Erbil se hizo mucha fiesta –recuerda el padre Naim–. La gente casi empezó a preparar las maletas para volver. Pero el obispo, el primero en visitar la ciudad, la encontró totalmente destruida. ¿Dónde está mi ciudad?», se ha preguntado el padre.

El Comité para la Reconstrucción de Nínive, puesto en marcha por las iglesias caldea, siro-ortodoxa y siro-católica y acompañado por esta fundación pontificia ha calculado, después de analizar las casas una a una, que el coste total de los arreglos rondará los 250 millones de dólares (213 millones de euros). ACN se ha comprometido a aportar 21 millones de euros, de los cuales dos saldrán de nuestro país. Para cubrir el resto, el Comité de Reconstrucción está pidiendo ayuda a diversos países occidentales y entidades internacionales como la ONU y la Unión Europea.

28.900 cristianos ya están en casa

«¿Por qué debemos abandonar nuestro país, nuestra tierra, donde está nuestra historia y donde empezó nuestra fe? Muchos hemos decidido quedarnos con la esperanza de volver a casa un día. No es un ojalá. Queremos volver». Incluso muchos que emigraron a otros países quieren regresar. «Tenemos la esperanza de que Dios no nos abandonará y de que en todo el mundo hay hermanos» que les prestarán su apoyo.

«Hemos ayudado a la Iglesia de Irak con más de 34 millones de euros desde que llegó el Daesh y ahora vamos a estar a su lado para que los cristianos de Nínive puedan regresar», ha afirmado Javier Menéndez Ros, director de ACN España. Hasta la fecha, según datos del Comité de Reconstrucción de Nínive, 28.900 cristianos han regresado ya a sus respectivas ciudades en Nínive, lo que significa más de 6.330 familias.