Un año de gracias jubilares en Leganés

Era un 14 de agosto, en el año 1117, cuando la Virgen se apareció a un molinero humilde apodado el cristiano a las orilla del arroyo, junto a su molino, en las tierras de Butarque. Este suceso, del que se han cumplido 900 años, ha sido el motivo de la concesión por parte del Papa Francisco de un Año Jubilar a la localidad leganense. «Además este año tan marcado ha tenido su punto álgido en la coronación pontificia de la Virgen, un proyecto que se culminó de las manos de ya nuestro anterior obispo, Joaquín María López de Andújar», afirma Lorenzo Cuadrado, vocal de la Asociación de la Asunción de Nuestra Señora de Butarque.

Miles de peregrinos, no solo de la Comunidad de Madrid, sino de toda España «han venido hasta a esta humilde ermita de Leganés con una alegría contagiosa», señala Cuadrado. «Han sido 365 días de indulgencia plenaria, de oportunidades tras cruzar ese dintel, de acercarse más al corazón de Cristo a través de la mano atravesada y extendida en la cruz y a su vez, en la del sacerdote por la absolución de los pecados y de la Eucaristía, además de confesar nuestra fe y pedir por el Santo Padre y sus intenciones».

Durante todo el Año Jubilar, la visita de la Virgen a cada uno de los lugares en los que ha estado «especialmente a las parroquias, ha sido un regalo para toda la comunidad, tanto para los mayores como para los pequeños. Don Joaquín, que presidió una ceremonia de las últimas parroquias, comentó al presidente: «Estáis haciendo un lío, muy bonito».

El pasado 6 de enero, monseñor López de Andújar, ya como administrador diocesano tras el nombramiento de monseñor Ginés García Beltrán como nuevo obispo getafense, celebraba la clausura del Año Jubilar en la parroquia de San Salvador, en la que destacaba que «tenemos que estar pendientes y cuidar de las frutos de este año y de la lluvia de gracias derramada, aparte del tiempo, que por cierto impidió el solemne traslado de Nuestra Señora de Butarque y el cierre de la Puerta Santa, que fue retomado el pasado domingo 14 de enero con la participación de numerosas hermandades de la Archidiócesis de Madrid y de todos sus hijos», recuerda Cuadrado.

La coronación de la Virgen

El 20 de mayo tuvo lugar, ante más de 5.000 personas, la coronación pontificia de Nuestra Señora de Butarque, de manos de monseñor Joaquín María López de Andújar. «Fue un momento único en el que participaron numerosas hermandades, cofradías y asociaciones de toda la archidiócesis de Madrid, y en la que tuvieron un lugar destacado los padrinos de la coronación: los santos Cosme y Damián, patrones de Polvoranca; san Nicasio, patrón de Leganés, y Santa María la Real de la Almudena, patrona de la archidiócesis de Madrid».

Lorenzo Cuadrado explica que «la coronación no se queda sencillamente en una corona de reina para la Virgen», sino que hay una corona social que la asociación lleva realizando muchos años con Cáritas, las voluntarias de San Vicente de Paúl, el comedor de Paquita Gallego y, este año por primera vez, con el misionero Ángel Espuela para dos proyectos en Benín, uno educativo y otro sanitario.

«La Virgen también lleva una corona catequética, evangelizando de numerosas formas, como la música, a través de conciertos en la parroquia San Salvador y en el auditorio de la Universidad Carlos III, todo ello con la colaboración del Ayuntamiento de Leganés, que incluso nombró a la Virgen alcaldesa honoraria tras las miles de firmas recogidas por la asociación». Este título se añade al de Patrona de la villa y Capitán General, «otorgado este último por el rey Felipe II».