«Somos anunciadores de la esperanza»

–Santo Padre, somos periodistas cristianos españoles, estamos comprometidos con la Verdad, no queremos fake news, ¿tiene un mensaje para nosotros?

–No digan mentiras.

Con una sonrisa, el Papa respondió así a Antonio Moreno, de la Delegación de Medios del Obispado de Málaga, en los saludos posteriores a la audiencia general del pasado 31 de enero. Con apenas tres palabras, Francisco condensó su reciente mensaje para la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, que pone el foco en la proliferación de noticias falsas y, como antídoto, reclama «un periodismo hecho por personas para personas, y que se comprende como servicio a todos, especialmente a aquellos –y son la mayoría en el mundo– que no tienen voz».

El texto marcó la Asamblea de Delegados Diocesanos de Comunicación Social, que reunió durante tres días en Roma a cerca de 80 profesionales de la comunicación de las diócesis españolas y a los prelados de la Comisión Episcopal de Medios –con el obispo electo de Getafe, Ginés García Beltrán, a la cabeza–. En una de las sesiones, el número dos de la nueva Secretaría de Comunicación del Vaticano, el argentino Lucio Adrián Ruiz, les recordó que, un contexto de desinformación y enfrentamiento, «somos anunciadores de la esperanza».

«Comunicación no es tecnología, es kerigma», insistió, incidiendo en que si las estructuras comunicativas deben adaptarse a cada época es precisamente para hacer presente el Evangelio. San Juan Pablo II ya pedía «cambiar el sistema comunicativo» porque no respondía a la «cultura contemporánea» –detalló–. Luego, Benedicto XVI «también tenía en su corazón reformar un sistema rico y vivo», compuesto por «nueve organismos con más de 650 trabajadores» en el caso del Vaticano. «Trabajaban en compartimentos aislados. En su fuerza está su debilidad».

La llegada de los smartphone –continuó Ruiz– no permite esos compartimentos: «Había un lugar, un tiempo, un aparato o un objeto físico –un diario–. La era smart pone todo junto». «¿Quién puede mantener una infraestructura que haga nueve veces lo mismo, con distintas líneas editoriales?», se preguntó al hablar de cuando cada organismo empezó a hacer texto, foto, vídeo… «Se necesita una visión unificada de lo que piensa la institución». Y por eso, ya con Francisco, se creó la nueva Secretaría de Comunicación, que se ha ido armando como «una cebolla» y sabiendo que se podían dar pasos en falso.

Fruto de este trabajo, a finales del pasado año se presentó el renovado portal vaticannews.va, que reúne todo el material informativo en texto, audio y vídeo, además de enlazar a las distintas redes sociales de la Santa Sede y del Papa. «Muchos tuits de @Pontifex_es tocan la vida de las familias, de los jóvenes… Es el inicio de un proceso que abre un horizonte», señaló Alessandro Gisotti, del equipo que gestiona la cuenta, en otra de las sesiones.

El «compañerismo» de los corresponsales

Además de conocer la reforma de los medios de comunicación vaticanos –que en palabras del secretario del Consejo de Cardenales, Marcello Semeraro, en otro de los encuentros, es «un test para la reforma de la Curia»–, los delegados tuvieron varias sesiones académicas en la universidad de la Santa Croce, visitaron la Sala Stampa de la mano de su vicedirectora, la española Paloma García Ovejero, y también compartieron un rato más distendido con aquellos que facilitan que la voz del Papa llegue a los españoles: los corresponsales.

En una mesa redonda en el Pontificio Colegio Español San José –que celebra su 125 aniversario–, Darío Menor (Vocento y Vida Nueva) recordó que, a pesar del enorme trabajo que supuso cubrir la renuncia de Benedicto XVI, fue «una delicia»; al tiempo que resaltó lo importante que fue que Francisco prestara atención a los rohinyá en su viaje a Bangladés y Myanmar.

En esta línea, la corresponsal de COPE y colaboradora de Alfa y Omega, Eva Fernández, alabó el «compañerismo» que existe entre los periodistas que cubren la información del Vaticano y reconoció el regalo que ha supuesto trabajar cerca de Francisco durante el año y medio que lleva en Roma: «Es capaz de darte un tarantán al corazón. Sabe comunicar como el profesor que fue». A su lado, Javier Martínez Brocal (Rome Reports) subrayó que «con el Papa el mensaje interesa mucho» y puso en valor que «se ha dado cuenta de que es padre y ejerce».

Por su parte, Antonio Pelayo (Antena 3 y Vida Nueva) explicó que, aunque en Roma a veces existe cierta «desconfianza» hacia los periodistas, el Papa tiene «una gran cualidad: su cercanía». Además, el decano de los periodistas españoles en la Santa Sede señaló que «si las presiones aumentan es porque las reformas van adelante».