Teresa de Calcuta, la gran estrella entre las mujeres Nobel - Alfa y Omega

Teresa de Calcuta, la gran estrella entre las mujeres Nobel

La Madre Teresa de Calcuta es uno de los grandes reclamos de la exposición Mujeres Nobel, expuesta hasta el 20 de marzo en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid. La muestra ha coincidido con críticas a la Academia Sueca por la infrarrepresentación femenina entre sus galardonados que se mantiene hasta las últimas ediciones. Las acusaciones incluyen premiar a varones por descubrimientos que, en realidad, correspondían a sus colegas mujeres

Redacción
Federico Mayor Zaragoza, junto a Belén Yuste (izquierda) y Sonnia Sonnia L. Rivas-Caballero, durante su visita a la exposición Mujeres Nobel

Belén Yuste es la comisaria, junto a Sonnia L. Rivas-Caballero, de la exposición Mujeres Nobel, inaugurada el 20 de septiembre en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid, donde estará hasta el 20 de marzo. Alrededor de 150.000 personas ya la ha visitado, entre ellas, un grupo de postulantes de las Misioneras de la Caridad, o el ex director de la UNESCO, Federico Mayor Zaragoza, quien se detuvo particularmente junto a la santa de Calcuta, a quien conoció en vida

La exposición Mujeres Nobel ha coincido con un momento de creciente concienciación sobre la discriminación de la mujer, que empezó con el movimiento Me-Too, y se ha extendido a la desigualdad en las condiciones laborales. ¿Es también más difícil para una mujer obtener un Nobel?
Desde luego, el sesgo de género también ha influido en los Premios Nobel. Desde 1901, que se concede el prestigioso galardón, casi 900 varones han sido premiados y tan solo 48 mujeres lo han conseguido. Si duda, esto también se debe a la secular desigualdad de oportunidades, ya que la mujer ha accedido mucho más tarde a la enseñanza superior, y mucho más aún en el terreno de la investigación, por lo que, si se mira desde ese ángulo, la cifra no es tan negativa. Lo que realmente sorprende es que en los dos últimos años ninguna mujer haya merecido el Premio Nobel. En 2009 tres científicas fueron galardonadas (Ada Yonath, Elizabeth Blackburn y Carol Greider); al fin parecía que la desigualdad de género se superaba definitivamente, pero las siguientes ediciones han demostrado que fue un espejismo.

¿Es cierto que descubrimientos realizados por mujeres han terminado siendo atribuidos a varones?
En el mundo científico está ampliamente reconocido que ha habido varias mujeres que se merecían el Premio Nobel y, finalmente, fueron ignoradas. Famosos son los ejemplos de Lise Meitner, que siendo clave en el descubrimiento de la fisión nuclear, el Premio Nobel de 1944 le fue concedido en solitario a Otto Hahn; Rosalind Franklin, que descubrió la estructura del ADN, fue ignorada el Nobel de 1962; o la astrofísica Jocelyn Bell, excluida en el Premio Nobel de 1974 por el descubrimiento de la primera radioseñal de un púlsar, el premio le fue otorgado a Antony Hewish.

Una de las Nobel más buscadas en la exposición no es una científica, sino una religiosa, la madre Teresa de Calcuta. ¿Qué acogida está teniendo entre el público?
La exposición engloba mujeres galardonadas en las cinco disciplinas que estableció Alfred Nobel en su testamento. En la sección de la Paz, y en la exposición en general, Teresa de Calcuta es de las mujeres más reconocidas por el público, ya que su popularidad ha sido enorme y su obra sigue vigente. Además, Teresa de Calcuta es una de las premiadas cuyo espacio cotidiano se ha recreado en la exposición. Algunas personas se han emocionado al contemplar su estatua orante, que parece ella misma. Ha sido cedida por la artista María José Aroz, gran colaboradora de las Misioneras de la Caridad, que realizó el boceto directamente mientras la Madre oraba en su capilla de Calcuta. Meses antes de morir, Madre Teresa recibió la estatua en Casa-Madre de Calcuta y pidió que, a su muerte, fuese colocada en el rincón de la capilla donde ella oraba.

Federico Mayor Zaragoza se interesó especialmente por esta santa durante su visita a la exposición. ¿Qué dijo?
Sí, el ex director general de la UNESCO quiso detenerse especialmente en el espacio dedicado a Teresa de Calcuta, a quien había conocido y admira profundamente. Destacó su pragmatismo en el día a día de su ingente labor y recordó que, cuando le comunicó la concesión del Premio Educación por la Paz de la UNESCO, le pidió que viajase a Calcuta para dárselo, pues quería compartir ese momento con sus hermanas misioneras.

Han conseguido que un grupo de misioneras de la caridad acudiera a ver la muestra. ¿Cómo fue la visita?
Para nosotras, como comisarias de la exposición y colaboradoras de la obra de Madre Teresa, fue una visita muy entrañable. Vino una de las misioneras con un nutrido grupo de jóvenes postulantes, llenas de la alegría que tanto les pedía su fundadora. Escucharon atentas todas las explicaciones y les encantó ver la fotografía del discurso del Nobel de la Madre, así como la colección de sellos internacionales y la vajilla del Banquete Nobel, al que supieron que Madre Teresa había renunciado, solicitando su montante económico para los pobres.