«Meter cámaras en un Carmelo es una aventura teresiana» - Alfa y Omega

«Meter cámaras en un Carmelo es una aventura teresiana»

Las teresianistas Belén Yuste y Sonnia L. Rivas han logrado lo imposible: que los 17 Carmelos fundados por la Santa abriesen su clausura para grabar el documental que ayer emitió TVE. Ellas metieron las cámaras…, y Teresa se metió en el corazón de los miembros del equipo técnico, aunque «muchos hacía años que no pisaban una iglesia»

José Antonio Méndez
La cantante y musicóloga Sonnia L. Rivas y la científica y teresianista Belén Yuste

Más de 20 años de trabajo y dedicación a promover por todo el mundo la figura de santa Teresa de Jesús, desde la literatura, la historiografía y la música, hacen que a las teresianistas Belén Yuste y Sonnia L. Rivas-Caballero se les abran puertas infranqueables para el común de los mortales. Puertas como las de los fondos de la biblioteca de El Escorial, donde se conservan los manuscritos originales de Teresa; puertas como las de Televisión Española, que les aceptó el proyecto del documental sobre la Mística Doctora que la cadena pública emitió ayer. Y puertas cuasi herméticas, como las de las clausuras de los 17 Carmelos Descalzos fundados por la misma Teresa, donde el cariño que les tienen las religiosas sirvió para que ambas lograsen meter en ellos a un numeroso equipo de cámaras, guionistas, fotógrafos, iluminadores y técnicos, con su ruidoso cargamento de grúas, focos, micrófonos, cables y carriles, con el que recorrieron por primera vez en la historia de la televisión los lugares originales que pisó, hace cinco siglos, la primera mujer Doctora de la Iglesia. Una experiencia que ellas describen como «un regalo de la Santa y una aventura teresiana».

Fue el Vicario General de los carmelitas, el padre Emilio Martínez, quien les sugirió la idea del documental en TVE, «y aunque lo vimos muy difícil, lo intentamos confiadas en la Santa». Una vez que localizaron a la productora Sateco Documentalia, plantearon el proyecto y consiguieron que el Ente público no sólo accediera a emitirlo, sino también a copatrocinarlo (junto a Rocaviva eventos, la empresa que ellas crearon para tal fin) «por el rigor histórico del proyecto y el interés que despierta la Santa, que tiene una personalidad tan humana que es muy difícil no sentirse identificado de algún modo con ella», explica Sonnia, mezzosoprano y musicóloga que ha dado por todo el mundo recitales con textos de la mística abulense.

De la indiferencia, al cariño

Para ellas, las semanas de rodaje estuvieron cuajadas de momentos inolvidables, pero lo más llamativo «fue ver el cambio de actitud que suscitó la Santa entre los miembros del equipo, que son unos excelentes profesionales pero que, en muchos casos, se trataba de chicos jóvenes que no habían pisado un convento en su vida, ni una iglesia en muchos años», cuenta Belén Yuste. Por eso, «aprovechábamos los desplazamientos para ir hablándoles de santa Teresa, de Jesús, les leíamos la historia de cada fundación… Fue muy gratificante ver a los jóvenes preguntándonos: ¿Aquí qué pasó? Contadnos, contadnos; a un cámara que era poeta, con el que estuvimos hablando de poesía mística; u oírles sorprenderse por la alegría de las monjas. Empezaron como un trabajo más y cada vez se les notaba más cariño por la Santa y por las monjas, que en todos los Carmelos les trataron con mucha delicadeza: les daban zumos, pastas…». Así, «del ruido que había el primer día, fueron entrando en la conciencia de vivir algo único, respetando el silencio del convento, etc. Y empezaron a hacer fotos, y hasta a hacerse ellos mismos fotos con alguna reliquia. Son las cosas de la Santa, que siempre despierta el cariño y la alegría de quien la conoce».

Si usted no pudo ver ayer el documental, puede hacerlo en www.tve.es