Una Iglesia que tiende puentes en Irak - Alfa y Omega

Una Iglesia que tiende puentes en Irak

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Foto: CNS

La púrpura para Louis Raphaël Sako significa más que el reconocimiento del Papa a la labor del patriarca caldeo y presidente de la Asamblea de Obispos católicos de Irak. El cardenalato ha sido celebrado por todos los que creen en la unidad del país desde una concepción inclusiva de ciudadanía capaz de integrar a las personas de las distintas comunidades étnicas y religiosas. Supone también un respaldo a un tipo de presencia pública de la Iglesia, que al tiempo que defiende con vigor los derechos de los cristianos (en los últimos años, más que nunca pisoteados), sabe tender puentes entre los distintos grupos sociales. Es la autoridad moral de una Iglesia mártir, consciente de la trascendencia de su misión histórica, lo cual en absoluto implica que esté exenta de problemas. Este 7 junio arranca el Sínodo anual de la Iglesia caldea, uno de cuyos retos es avanzar en la necesaria puesta al día de una comunidad que se remonta a los tiempos de los primeros cristianos, pero que debe actualizar su liturgia y su propuesta educativa para conectar con los jóvenes del siglo XXI.