«Los cristianos de Orissa nos sentimos especiales, porque Dios nos ha elegido para sufrir por Cristo» - Alfa y Omega

«Los cristianos de Orissa nos sentimos especiales, porque Dios nos ha elegido para sufrir por Cristo»

Cinco años después de la gran persecución de 2008, monseñor John Barwa, arzobispo de Cuttack-Bhubaneswar, en el estado de Orissa (india) afirma que, al final, todo ha sido «una bendición de Dios». «La fe de mi pueblo ha crecido y miles de personas piden ser bautizadas», explica en Madrid, en la sede de Ayuda a la Iglesia Necesitada

Redacción

Orissa, uno de los estados más pobres de la India, es noticia con frecuencia en la prensa internacional por los continuos huracanes, tifones e inundaciones que con dramática periodicidad golpean este territorio. En 2008, lo fue también por las violentas persecuciones de radicales hinduistas contra cristianos, que dejaron 83 muertos y unos 60 mil desplazados, junto a incontables viviendas e iglesias destruidas. Algunas familias todavía no han podido volver a sus casas.

«¿Por qué a nosotros, que somos pobres?», se preguntaron entonces muchos cristianos, desconcertados, según explica su obispo. Antes de que pasara mucho tiempo, «la respuesta fue: porque Dios nos ha elegido para ser santos». De modo que «los cristianos de Orissa nos sentimos especiales, porque Dios nos ha elegido para sufrir por Jesucristo».

Ya no hay ataques de esa magnitud, aunque sí esporádicos actos de violencia y frecuentes hostigamientos. Monseñor Barwa, sin embargo, se maravilla de que la gente le vaya a visitar, no para llorarle sus desgracias, sino para contarle, con orgullo: «han destruido nuestras casas, pero no han podido destruir nuestra fe».

De hecho, la fe de los católicos ha crecido, y «miles piden ser bautizados», a pesar de las dificultades que implica la ley anticonversión vigente en este estado. «Habrá un aumento importante de la Iglesia», y no sólo en términos cuantitativos: «serán testigos comprometidos del amor de Dios, porque han experimentado la persecución».

Preguntado acerca de la indolencia de muchos cristianos en otros lugares, como España, el prelado cita a Tertuliano, que en el siglo II dejó escrito que «la sangre de los mártires es semilla de nuevos cristianos». En España, no hace mucho -recuerda- «los cristianos sufrieron persecución. Pero seguramente, la vida después se ha hecho más sencilla». Algo así ha sucedido también -a su juicio- en algunas regiones de la India, como Kerala, donde la población cristiana alcanza el 20 % de la población (frente al 2 % de media en el país, o el 2,8 % de Orissa). «Hay más dinero, la vida se ha hecho más fácil, la gente se acomoda, y hay menos vocaciones».

Impresionante testimonio de perdón y reconciliación

El Director de Ayuda a la Iglesia Necesitada en España, Javier Menéndez Ros, ha seguido muy de cerca la situación en Orissa, desde la persecución de 2008. Esa violencia «ha pasado, pero nosotros seguimos ayudando a la Iglesia necesitada de Orissa», explica.

Ayudar a Orissa, en todo caso, es una buena inversión para los católicos españoles. «Deberíamos hacerlo, aunque sólo sea por interés egoísta, afirma, y pone como ejemplo el creciente número de sacerdotes y religiosas de esta región que están viniendo a España.

Además, los cristianos de Orissa son «un ejemplo precioso de Iglesia que ha sufrido mucho y que ahora está dando muchos frutos». El fruto son las vocaciones, pero también el bien que está haciendo «este testimonio religioso humano tan impresionante de perdón y reconciliación».