Francotiradores, niños asesinados… Nicaragua retoma el diálogo tras el demoledor informe de la CIDH - Alfa y Omega

Francotiradores, niños asesinados… Nicaragua retoma el diálogo tras el demoledor informe de la CIDH

Según el informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) «la acción represiva del Estado ha producido, al menos, 212 personas muertas, 1.337 personas heridas y 507 personas estuvieron privadas de la libertad». La última víctima fue un bebé de 14 meses, según denunció su madre, que recibió un tiro en la cabeza. Este lunes se retoma el diálogo nacional en el país después de que el presidente Ortega haya accedido a invitar a las conversaciones a la CIDH, a la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos) y a la Unión Europea

Redacción
Foto: Efe / Douglas López.

La represión en Nicaragua no conoce límites. La última víctima ha sido un bebé de solo 14 meses que recibió un disparo en la cabeza. Según su madre, Karina Navarrete, el pequeño fue asesinado por agentes policiales durante los tiroteos efectuados el pasado sábado en los barrios del este de Managua por las denominadas como «fuerzas combinadas», conformadas por las fuerzas del orden y las turbas defensoras del presidente Daniel Ortega. A pesar de las acusaciones vertidas por la madre, el Gobierno rechaza haber tenido que ver con el asesinato que ocurrió justo el día 23 de junio, fecha en la que los nicaragüenses celebran el Día del Padre. Además del nefasto y censurable crimen, la represión se cobró la vida de al menos otras siete personas, según el recuento realizado por el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), institución que ha contabilizado cerca de 220 víctimas mortales desde que iniciaron las protestas en Nicaragua hace dos meses.

Dos de las ocho personas asesinadas eran estudiantes que estaban atrincherados en las cercanías de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua, institución que se ha convertido en un núcleo de resistencia contra el régimen de Ortega, un exguerrillero que gobierna ininterrumpidamente el país desde 2007 y que no muestra ninguna intención de dejar el poder.

Elecciones

Ante el incesante clima de violencia extrema que asuela la pequeña nación centroamericana, la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) volvió a pedir al presidente Ortega que considere la oferta que han presentado junto a la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia para que se celebren elecciones generales en el año 2019, una iniciativa que es vista por la oposición como un requisito indispensable para solucionar la crisis. «No nos cansemos de orar por la paz», dijo Leopoldo Brenes, arzobispo de Managua y presidente del CEN, durante la Misa celebrada el domingo para celebrar el nacimiento de Juan Bautista. Durante la Eucaristía el también presidente de la CEN anunció que este año no llevará a cabo en la catedral metropolitana de Managua la bajada de la imagen de la Sangre de Cristo, uno de los mayores tesoros del templo, que cumplirá el 30 de junio 380 años de su llegada a Nicaragua, procedente de Guatemala. Asimismo, el cardenal Brenes informó a los fieles presentes que el Papa Francisco «está preocupado» por Nicaragua y pregunta «constantemente» por la situación del país.

Por su parte, varias organizaciones cercanas a la oposición han pedido a los empresarios que vuelvan a convocar una huelga general para seguir añadiendo presión contra el presidente Daniel Ortega.

Reinicio del diálogo

Mientras tanto, este lunes se reiniciará el diálogo nacional para superar la crisis que asola el país desde mediados de abril. En la reunión participará un equipo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Precisamente, la presencia de la CIDH, así como de la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (ACNUDH) y de la Unión Europea, fue un requisito establecido por la Alianza Cívica y aprobado por la Conferencia Episcopal de Nicaragua, para reiniciar el diálogo, suspendido el pasado lunes por falta del cumplimiento de los acuerdos por parte de Ortega.

Informe del CIDH

La presencia del CIDH en el diálogo nacional se produce después de que el viernes presentara un demoledor informe ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) en el que denuncia graves violaciones de los derechos humanos en el marco de las protestas sociales en Nicaragua y en el que alerta, incluso, del despliegue de francotiradores.

«La acción represiva del Estado ha producido, al menos, 212 personas muertas hasta el 19 de junio, 1.337 personas heridas y 507 personas estuvieron privadas de la libertad», denunció la CIDH.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos mostró su «profunda preocupación por la especial afectación que ha tenido el uso excesivo de la fuerza en los derechos de los niños y adolescentes». Según la información de la que disponen, «los jóvenes y niños fueron víctimas especialmente vulnerables de la violencia represiva del Estado durante las protestas y con posterioridad a las mismas».

Concretamente, hasta el 20 de junio, «16 niños y adolescentes habrían muerto de forma violenta en el contexto de la represión a las manifestaciones». Álvaro Manuel Conrado Dávila, de 15 años, por ejemplo, «recibió un disparo de arma de fuego en el cuello mientras apoyaba llevando “agua a los muchachos de la UPOLI”» y «al llegar al Hospital (público) Cruz Azul, se le habría negado atención médica».

ABC / Redacción