Colombia: «El proceso de paz debe continuar, incluso acelerarse» - Alfa y Omega

Colombia: «El proceso de paz debe continuar, incluso acelerarse»

Redacción

Ante el asesinato a manos de las FARC de 11 militares en la madrugada del miércoles –ataque que dejó también 20 heridos–, el obispo de Cúcuta, monseñor Julio César Vidal Ortiz, manifestó su rotundo rechazo y se el sentimiento de dolor y desconcierto que embarga al país. A raíz de este suceso, el Presidente Santos ordenó reanudar los bombardeos contra la principal guerrilla del país, con la que su Gobierno mantiene negociaciones en La Habana (Cuba).

Pese a este atentado, la Iglesia confía en que se pueda seguir avanzando hasta llegar a un acuerdo de paz definitivo. «Nos preocupa mucho, porque este acto se da en medio de una negociación, que es fruto de la convicción de parte de las Farc que por las armas no se puede adquirir el poder y de parte del gobierno de abrir una puerta para que entren a la vida democrática del país», dijo el obispo. «Queremos invitar a las Farc a reconocer esto como un error. Hay una tregua unilateral que deben respetar; porque esto crea incredulidad en medio de la población. Deben pedir perdón a las víctimas y luego al pueblo colombiano», enfatizó el obispo.

Monseñor Vidal pidió también al Gobierno «acelerar el proceso de la terminación del conflicto armado con las Farc», aunque no sin plantear a la guerrilla «unas exigencias muy concretas»

Coincidió con él el presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia y arzobispo de Tunja, monseñor Luis Augusto Castro Quiroga, que el miércoles dijo que  los «los colombianos no quieren una tregua disfrazada de acuerdo de paz, sino un verdadero acuerdo que lleve a una solución definitiva del conflicto».

En declaraciones a los medios, el prelado expresó que a pesar de presentarse estos hechos lamentables, el proceso de paz debe continuar, incluso acelerarse.

Castro Quiroga reiteró la cercanía de la Iglesia al Ejército Nacional (reacio a las negociaciones con la guerrilla) y a los familiares de las víctimas. Al mismo tiempo, dejó caer la hipótesis de que la matanza pudo deberse a «una equivocación a espaldas, desobedeciendo a una tregua que había pactada». Por ello, «lo importante es que [las partes] sigan trabajando en los diálogos».