«La competencia entre nosotros es cosa del pasado»

«La competencia entre nosotros es cosa del pasado», dijo el Metropolita Hilarión, al presentar, el lunes, dos libros en Madrid, acompañado del arzobispo de Granada y Presidente de la Comisión episcopal para las Relaciones Interconfesionales, monseñor Javier Martínez, y del obispo auxiliar de Madrid, monseñor Martínez Camino. «Hoy, católicos y ortodoxos somos socios», tenemos un mismo reto misionero y nos enfrentamos a «amenazas comunes», al relativismo moral, que conduce a prácticas inaceptables como la redefinición legal del matrimonio, el aborto o la prostitución. Por ello, «el Patriarca Cirilo concede gran importancia a los contactos con los católicos», aseguró Hilarión en el Foro Juan Pablo II, de la parroquia de La Concepción.

El líder de la Iglesia ortodoxa rusa es autor del primero de los dos libros, Libertad y responsabilidad: a la búsqueda de la armonía. Derechos humanos y dignidad de la persona, con prólogo de monseñor Martínez Camino, que considera esta obra una gran aportación al diálogo con el mundo laico, en la línea de «un filósofo poco sospechoso de supuestos prejuicios religiosos, como es Jürgen Habermas». Y explica el obispo auxiliar de Madrid: «El autor levanta su voz frente a una determinada ideología que se ha apropiado de los derechos humanos, pero que, en realidad, pone en peligro la dignidad y la libertad de las personas», al desproveer de fundamento a esos derechos, que quedan al arbitrio del poder político. «El Estado (repite el autor) no sancionará una determinada confesión religiosa (será aconfesional), ni penalizará, por ejemplo, la infidelidad de los esposos o las relaciones entre personas del mismo sexo. Pero la distinción entre vida personal y vida pública no autoriza a suponer (como hace el secularismo antropocéntrico de nuestros días)… que lo público sea un lugar donde se crean derechos y se imponen obligaciones basados exclusivamente en una capacidad ciudadana de decidir expurgada de toda referencia religiosa y moral».

El segundo libro, publicado en España también por la editorial Nuevo Inicio, del Arzobispado de Granada, es El misterio de la fe. Una introducción a la Teología ortodoxa, del propio Metropolita Hilarión, que lo escribió hace 20 años, inicialmente como apuntes para sus alumnos del Seminario de Moscú. El prólogo es del arzobispo de Granada, monseñor Javier Martínez, quien aseguró que este libro puede aportar mucho a «los católicos del Finisterre», ayudándoles, en primer lugar, a recuperar «la familiaridad en el trato con los Padres de la Iglesia», algo que -lamentó- la Iglesia en Occidente ha perdido en gran medida. A los ortodoxos rusos podemos acudir también para refrescar «la concepción de la Iglesia como cuerpo, la corporalidad de la Iglesia», añadió el arzobispo de Granada, que lamentó que la mentalidad individualista ha calado hasta tal punto entre los católicos occidentales que nuestra idea de la Iglesia se asemeja a menudo a la de un contrato social. Hay que «recuperar el concepto de sacramentalidad, fundamental para el cristianismo», dijo. Esto implica también una concepción del ser humano como «una realidad creada para acoger lo divino, para participar de la vida divina. Cualquier otra cosa es reductiva»; el antropocentrismo, al final, «lleva a la muerte del hombre».