Retiro espiritual de los obispos de EE. UU. con la crisis de los abusos sexuales como telón de fondo - Alfa y Omega

Retiro espiritual de los obispos de EE. UU. con la crisis de los abusos sexuales como telón de fondo

Los ejercicios espirituales estarán dirigidos por el predicador de la Casa Pontificia, el fraile capuchino Raniero Cantalamessa

Redacción
El padre capuchino Raniero Cantalamessa, predicador de la Casa Pontificia, durante una predicación de Adviento, en la capilla Redemptoris Mater del Palacio Apostólico del Vaticano, el 4 de diciembre de 2015, en la que participo el Papa Francisco. Foto: L’Osservatore Romano

En mitad de los trabajos que la Conferencia Episcopal de Estados Unidos (USCCB) está acometiendo para responder a la crisis por los escándalos de los abusos sexuales de menores, los obispos estadounidense realizarán un retiro espiritual desde hoy, 2 de enero de 2019, hasta el próximo martes 8 de enero.

Los prelados dedicarán siete días a la oración en el Seminario Mundelein, de la archidiócesis de Chicago, por invitación del Papa Francisco, quien ofreció al predicador de la Casa Pontificia, el fraile capuchino Raniero Cantalamessa.

Los Ejercicios Espirituales fueron acordados entre el presidente de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos —y arzobispo de Galveston-Houston—, el cardenal Daniel DiNardo, y el Papa Francisco, que se reunieron a principios de octubre para hablar sobre la respuesta de la iglesia estadounidense a la crisis de los abusos sexuales.

Reunión de los episcopados mundiales

El retiro se produce apenas un par de meses después de la Asamblea Plenaria de la USCCB en la que los obispos norteamericanos reflexionaron casi exclusivamente sobre el tema de los abusos y un mes antes de que los episcopados de todo el mundo estén convocados en el Vaticano para afrontar esta lacra.

Precisamente, en la Asamblea Plenaria de noviembre, los prelados debatieron una serie de medidas concretas para responder a la crisis de abusos sexuales, aunque la aprobación definitiva de las mismas se aplazó hasta después de la reunión que todas las conferencias episcopales del mundo tendrán en febrero con el Papa