Eva Fernández: «El secreto del Papa es querer de tú a tú» - Alfa y Omega

Eva Fernández: «El secreto del Papa es querer de tú a tú»

«El Papa Francisco evangeliza por atracción», aseguró el arzobispo de Madrid, cardenal Carlos Osoro, este martes 11 de junio en la presentación del libro El Papa de la ternura, (Editorial Planeta) de la corresponsal de COPE en Italia y Vaticano, Eva Fernández

Redacción
Foto: Cristina Blázquez

«Es la presentación de un libro más bonita en la que he estado nunca», se escuchaba a más de una persona a la salida del evento. La tarde del martes, en el auditorio del Banco Sabadell de la calle Serrano, la corresponsal de COPE en Londres Paloma García Ovejero, presentó una mesa repleta de personalidades y mucho cariño. Junto a la autora, Eva Fernández, estaban el arzobispo de Madrid, cardenal Carlos Osoro; el director editorial de la Secretaría de Comunicación del Vaticano, Andrea Tornielli –pisaba Madrid por primera vez tras su nombramiento como director editorial del Dicasterio de Comunicación del Vaticano–; el director de Proactiva Open Arms, Óscar Camps, y la editora de la editorial Planeta, Ángeles Aguilera.

Para el cardenal Osoro el libro, compuesto por 14 historias de ternura del Papa, son «14 armas para realizar la revolución que más necesitamos en el mundo: la de la ternura». Según el arzobispo de Madrid, Francisco «evangeliza por atracción», por eso ha puesto en marcha una auténtica «revolución de la ternura, que tanto necesita este mundo, en el que parece que la indiferencia se apropia del corazón de los hombres».

El cardenal Osoro hizo referencia a algunos gestos de ternura del Papa conocidos en todo el mundo, como «el abrazo que dio la vuelta al mundo [a un hombre con la cara llena de bultos], en el chaleco naranja [entregado por Camps, de una niña siria que falleció en el Mediterráneo]… el Papa evangeliza así. Y a mí me parece que esto es coherente», añadió.

«El Papa no vendrá a España hasta que suelten el Open Arms»

El socorrista Òscar Camps, fundador y director de la ONG de salvamento marítimo Proactiva Open Arms, recordó emocionado cómo logró llamar la atención del Papa en una audiencia de 2016 levantando el renombrado chaleco naranja. «Seguridad me decía que bajara los brazos pero no lo hice, y el Papa se acercó a mi. Me impresionó su calidez, su ternura, su proximidad». Chaleco que, por cierto, se encuentra ahora colocado en la entrada del dicasterio romano dedicado al desarrollo humano integral, específicamente en la secretaría de migrantes y refugiados. Este dicasterio, señaló el activista catalán, fue puesto en marcha «como respuesta del Papa a la crisis de los refugiados». Algo que emociona al socorrista, que ha reconocido en diversas ocasiones cómo la Iglesia ha sido la única institución y el Papa el único jefe de Estado que han respondido a sus súplicas de ayuda.

Asimismo, reconoció ante el centenar de presentes que lo que «le rompió» del Papa fue que «en el momento en que más perseguidos estábamos por Salvini en Italia, el Papa nos dedicó una Misa privada en el Vaticano con 70 personas que nos apoyan». A esa Misa, Francisco invitó también a algunas personas rescatadas por el Open Arms y a los generales de la Armada italiana. «A los generales les pegó un repaso y a nosotros nos dijo: «Seguid haciendo lo que hacéis»».

Preguntados por una posible visita del Papa a España, el director editorial del Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede, Andrea Tornielli, recalcó que si lo hace «será por Eva Fernández», que insiste cada vez que tiene ocasión. Eso sí, añadió Camps, «para que venga el Papa primero tendrán que soltar el Open Arms».

«No ha dejado de llamarme señora»

Para el periodista italiano Andrea Tornielli «la ternura es la forma de evangelizar hoy». Y recordó una historia de cuándo Francisco era párroco en Buenos Aires. A su parroquia acudía de vez en cuando una mujer abandonada por su marido que, al no encontrar trabajo, se prostituía para dar de comer a dos niños pequeños. Un día, recordaba el vaticanista, fue a la parroquia a preguntar por Bergoglio para darle las gracias. Pero no era por la comida que recibía de Cáritas, sino «porque nunca ha dejado de llamarme señora».

Estos gestos, clausuró la autora, son los que han hecho posible un libro cuyo objetivo es que «esta revolución de la ternura se propague por el mundo», porque «es contagiosa y cura heridas». Gestos, aseguró Eva Fernández, que «el Papa no hace por la foto ni para figurar», porque «el secreto del Papa es querer de tú a tú» y para eso hay que «reformar el corazón».