Una monja española fallecida en 1998, nueva santa de la Iglesia - Alfa y Omega

Una monja española fallecida en 1998, nueva santa de la Iglesia

El Papa ha aprobado los decretos de reconocimiento de los nuevos santos y beatos que tendrá la Iglesia. Y entre ellos está el de la hasta ahora beata Madre María de la Purísima, Superiora de las Hermanas de la Cruz y fallecida hace menos de 20 años, en 1998

José Antonio Méndez

La Iglesia tendrá una nueva santa española: la Madre María de la Purísima, Superiora General de las Hermanas de la Compañía de la Cruz, fallecida hace menos de 20 años: en 1998. Así lo ha autorizado el Papa Francisco, después de aprobar los Decretos de canonización y beatificación que les presentó, el pasado martes, el cardenal Angelo Amato, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos.

Así, la Iglesia reconoce un nuevo milagro atribuido a la intercesión de la beata María de la Purísima (de nombre civil María Isabel Salvat Romero), Superiora General de la congregación fundada por la también santa española Sor Ángela de la Cruz.

La fama de santidad de la Madre María de la Purísima está más que acreditada. Y no sólo por el milagro que la llevó a los altares como beata en 2010, sino por su vida entregada a los más pobres. De hecho, a pesar de ser Superiora General, solía realizar los trabajos más humildes. Por ejemplo, cuando visitaba las comunidades de Villanueva del Río y Minas, iba a diario iba hasta las «cuevas» para atender a las enfermas que las Hermanas de la Cruz cuidaban: las lavaba, les hacía la comida, les lavaba la ropa, y siempre se reservaba para sí los trabajos más duros y penosos. Su ideal era trabajar sin figurar, fomentando un clima de confianza y serenidad.

Junto a ella, el Santo Padre ha autorizado a la Congregación para los Santos promulgar el decretos referentes a un milagro atribuido a la intercesión del beato Vincenzo Grossi, italiano, sacerdote diocesano y fundador del Instituto de las Hijas del Oratorio (1845-1917). Don Vincenzo «fue un ejemplo de amor en la pobreza, que exhortaba a vivir el Evangelio con gozo y sin lamentarse», según ha informado la Santa Sede.

Además, se ha aprobado la beatificación de dos jóvenes mártires en Laos: el Siervos de Dios Mario Borzaga, italiano (1932-1960), sacerdote profeso de la Congregación de los Misioneros Oblatos de la Virgen María Inmaculada, y Paul Thoj Xyooj, laosiano (1941-1960), laico catequista, asesinados por odio a la fe en Laos en abril de 1960. El primero tenía 27 años, el segundo 19. También será beatificado el italiano Giacomo Abbondo (1720-1788), párroco de pueblo que dio su vida ayudando a los feligreses a redescubrir la belleza y la bondad de Dios.

Asimismo, serán declarados Venerables Siervos de Dios la española María Rafaela Jesús Hostia, (en el siglo, Rafaela Martínez-Cañavate Ballesteros), religiosa profesa de la Orden de las Hermanas Capuchinas de Santa Clara (1915-1991); Jacinto Vera, uruguayo, obispo de Montevideo, (1813-1881); Antonio Antić, croata, sacerdote profeso de la Orden de los Frailes Menores; (1893-1965); Juliette Colbert de Falletti di Barolo, laica, viuda y fundadora de la Congregación de las Hijas de Jesús del Buen Pastor; francesa (1786-1864); María Brígida Postorino, italiana, fundadora del Instituto de las Hijas de María Inmaculada, (1865-1960); Sergio Bernardini, italiano, laico y padre de familia (1882-1966) y Domenica Bedonni de Bernardini, italiana, laica, viuda y madre de familia (1889-1971).