Último adiós al cardenal Estepa con la presencia del rey Felipe VI - Alfa y Omega

Último adiós al cardenal Estepa con la presencia del rey Felipe VI

La iglesia catedral de la Fuerzas Armadas en Madrid acogió el funeral por el cardenal José Manuel Estepa. Durante el oficio se leyó un telegrama del Papa Francisco, que destacó el «generoso servicio a la Iglesia» del purpurado

EFE
Foto: EFE/Casa S. M. el Rey

Felipe VI asistió este martes al funeral del arzobispo emérito castrense José Manuel Estepa, fallecido el pasado domingo a los 93 años, que se celebró en la iglesia catedral de las Fuerzas Armadas de Madrid y en la que se ha leído un mensaje del Papa Francisco en su memoria.

La misa funeral precedió al entierro en la misma iglesia de los restos del cardenal Estepa, quien fue arzobispo castrense y uno de los responsables de la revisión del catecismo español en los años 90.

Al funeral asistieron el presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez; su antecesor, Antonio María Rouco; el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro; el de Barcelona, Juan José Omella, y otras diócesis. También estuvieron los jefes de los tres Ejércitos, Francisco Javier Valera (Tierra), Javier Salto (Aire) y Teodoro López Calderón (Armada), el ya ex director del CNI, el general Félix Sanz Roldán y el ponente de la Constitución Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón.

A la llegada a la iglesia, el rey aludó al arzobispo castrense, Juan del Río, y, a continuación, dioo el pésame a los familiares del cardenal Estepa, entre ellos, una hermana, un hermano y varios sobrinos.

Al pie del altar, se situó el féretro, cubierto por una bandera de España, así como el báculo, la mitra y un retrato del cardenal fallecido.

En su homilía, Del Río ensalzó el papel que Estepa tuvo durante la Transición cuando fue auxiliar del cardenal Vicente Enrique y Tarancón.

«¿Acaso se puede entender la Transición sin la fuerza de la Iglesia buscando la reconciliación?», afirmó Del Río, que ha definió a Estepa como «un hombre dialogante, que sabía escuchar» y «un pastor renovador».

También subrayó que fue una persona que «sufrió enormemente con los españoles los años de plomo de ETA», cuando tuvo que oficiar numerosos funerales de militares asesinados por la banda terrorista como vicario general castrense, cargo que ocupó a propuesta del rey Juan Carlos desde 1983 a 2003.

Otro rasgo que ha destacado de Estepa es que fue «un servidor cercano y leal a los reyes sin hacer ruido y sin aparentar nada».«Sirviendo a la Corona, sirvió también a la reconciliación de los españoles», dijo. Del Río leyó un mensaje del papa Francisco dirigido a los familiares y sacerdotes castrenses en el que expresa su «cercanía espiritual» por el «generoso servicio a la iglesia» de Estepa.

El arzobispo castrense manifestó su agradecimiento a la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, por ser una de las primeras en llamar para mostrar sus condolencias. Robles no pudo asistir al funeral al estar presente en el debate sobre la investidura que se celebra en el Congreso.

De igual modo, agradeció el telegrama de pésame que enviaron los reyes en el que destacaban del cardenal Estepa «sus grandes cualidades humanas, su labor pastoral con las Fuerzas Armadas, su gran conocimiento, sensibilidad y sabiduría, así como su cercanía» a la Familia Real.

Estepa fue uno de los miembros de la jerarquía eclesiástica que participaron en la boda de los reyes en 2004 y durante su cargo como arzobispo castrense, los reyes Juan Carlos y Sofía inauguraron en 1985 la iglesia catedral de las Fuerzas Armadas, cercana al Palacio Real.

Durante la ceremonia religiosa, se interpretó el himno de España y La muerte no es el final.

A la conclusión, ya de manera privada, se dio sepultura a los restos del cardenal Estepa junto a los nichos de otros arzobispos castrenses.