Cristina Sánchez: «El beato Lolo me cuida desde el cielo» - Alfa y Omega

Cristina Sánchez: «El beato Lolo me cuida desde el cielo»

La redactora de Alfa y Omega Cristina Sánchez ha recibido este lunes el Premio Premio Lolo de Periodismo Joven, otorgado por la Unión Católica de Informadores y Periodistas de España (UCIPE). El presidente de la Comisión Episcopal de Medios de Comunicación Social, monseñor Ginés García Beltrán, la presentó como modelo de un periodismo que siempre tiene «rostro humano». «El compromiso con el trabajo bien hecho» y «la excepcional sensibilidad social y solidaria que Cristina Sánchez ha demostrado en el ejercicio de su profesión» son las cualidades que ha destacado el jurado

Ricardo Benjumea

Cristina Sánchez, «una gran periodista joven que, desde las páginas de Alfa y Omega, nos enseña a todos y muy bien, incluidos a los veteranos, cómo debe ejercerse el periodismo, con rigor y gran profesionalidad».

Así definía este lunes el presidente de la Unión Católica de Informadores y Periodistas de España (UCIPE), Rafael Ortega, a la galardonada con el Premio Lolo de Periodismo Joven de este año.

El acto fue presidido por el obispo de Guadix y presidente de la Comisión Episcopal de Medios de Comunicación, monseñor Ginés García Beltrán quien agradeció el «servicio a la Iglesia» de Cristina Sánchez, y confió en que «su carrera, que hemos visto brillante ya en sus primeros pasos, sea larga y llena de frutos en el futuro».

Tiempos inciertos para el periodismo

García Beltrán aludió a las dificultades por las que pasa hoy la profesión periodística, azotada por la precariedad laboral y por cambios rápidos e inciertos. «Somos conscientes todos de que esta querida profesión está pasando por momentos difíciles», dijo. «Junto a la incertidumbre del trabajo precario, estamos en la transición de un modelo de comunicación que ha envejecido rápidamente a otro que presenta más incógnitas que afirmaciones, a medio camino entre el papel y lo digital».

No obstante, «el periodismo no se acaba, siendo necesario cada vez más para dar satisfacción cumplida a las ansias de verdad que anidan en el corazón de todo hombre. Hoy sigue siendo necesario el rigor y la calidad de siempre, manteniendo la formación profunda y continuada de los profesionales». «Cambian las técnicas, y lo hacen a una velocidad de vértigo, pero se mantiene la centralidad del ser humano, el servicio a su desarrollo y promoción, el amor a la verdad y la entrega por el bien de las personas. Los cristianos hemos de dar noticias que siempre tengan rostro humano». Esto, señaló, es lo que hace cada semana Cristina Sánchez, con un estilo marcado siempre por «la frescura».

El fallo del jurado, leído por Álvaro de la Torre, secretario general de la UCIPE, afirma que Cristina Sánchez se ha hecho merecedora de este galardón por «el compromiso con el trabajo bien hecho que siempre ha demostrado, la seriedad y exigencia en su labor, y fundamentalmente, por un ejercicio del periodismo como una auténtica vocación cristiana, que traslucen las informaciones religiosas y sociales que firma semanalmente en Alfa y Omega y en sus colaboraciones en COPE y otros medios».

El jurado también valoró «la excepcional sensibilidad social y solidaria que Cristina Sánchez ha demostrado en el ejercicio de su profesión, dando voz a los pobres y excluidos». La premiada, además de ejercer el periodismo —destaca el fallo—, colabora en diversos proyectos solidarios con el Tercer Mundo.

«Lo primero, ser buenos periodistas»

Elsa González, presidenta de la Federación Española de Asociaciones de Prensa y anfitriona de la entrega del premio, resaltó el vínculo de Cristina Sánchez con Manos Unidas [en 2011, obtuvo el Premio Manos Unidas]. González destacó tanto su sensibilidad humana, como su profesionalidad. «Como decía el cardenal Herrera Oria —añadió—, primero tenemos que ser buenos periodistas, y luego católicos».

Entre las personalidades que asistieron a la entrega, estuvieron José Gabriel Vera, director del Secretariado de Medios de Comunicación Social y de la Oficina de Información de la Conferencia Episcopal; el presidente de la Fundación Crónica Blanca, Manuel Bru; los directores del semanario Vida Nueva (José Beltrán) y de la revista Mundo Cristiano (Darío Chimeno), o el responsable de información religiosa del diario La Razón, Fran Otero. También acudió el hasta hace un año director de Alfa y Omega, Miguel Ángel Velasco, a quien Rafael Ortega dedicó unas palabras de homenaje.

Otro de los que no se quiso perder la entrega del premio fue el sacerdote Rafael Higuera, postulador de la causa de Canonización de Manuel Lozano Garrido, Lolo, el beato que da nombre a este premio de la UCIPE. Higuera regaló a Cristina Sánchez una selección de libros del beato.

«Una profesión maravillosa»

«Recibir un premio es un acicate, pero si encima es un premio que se llama Lolo, el acicate es todavía es mayor», dijo Cristina Sánchez, al recibir el galardón.

La periodista recordó que, a su llegada a Alfa y Omega, uno de sus primeros trabajos fue la cobertura de la beatificación de Lolo en Linares. «Fue mi bautizo en el periodismo religioso». Cinco años después, «veo que el Beato Lolo me ha cuidado y me cuida desde el cielo. Lo tengo cristalino».

Sánchez destacó además la importancia de poner a «la persona en el centro» de la profesión periodística. «Cuando luchas porque la dignidad de la persona salga en tus escritos, en tus palabras, todo cambia de color», dijo. En esos momentos, «tú sólo eres el instrumento, el boli, el puente» que une a los protagonistas de las historias «con las personas que las leen, que las oyen y necesitan saber que hay gente en el mundo cuyas historias merecen ser contadas y que nos cambian la vida a todos». Esto es lo que hace «tan maravillosa esta profesión».

Este mensaje lo dirigía especialmente Cristina Sánchez a sus alumnos del Máster en Periodismo Religioso y Social de la Fundación Crónica Blanca. «No hay nada más bonito que poder enseñar a otros que vienen detrás que hay una forma de hacer periodismo unida a doctrina social de la Iglesia, unida a la dignidad del ser humano, al amor de Dios y a la fe que tenemos. Y que, con eso, se pueden cambiar vidas, empezando por la nuestra», dijo.

Acta del jurado

La Unión Católica de Informadores y Periodistas de España, UCIPE, ha fallado la VI edición del Premio Lolo de Periodismo Joven, que lleva el nombre de Manuel Lozano Garrido, Lolo, primer periodista laico beatificado. El jurado del premio, encabezado por el presidente de UCIPE, Rafael Ortega, e integrado por la junta directiva de la asociación, ha decidido conceder el galardón a Cristina Sánchez Aguilar, redactora del semanario Alfa y Omega, que se distribuye con el diario ABC. Por una amplia mayoría, el jurado se decantó por la candidatura de la joven redactora de este medio de información religiosa.

El jurado valoró especialmente el compromiso con el trabajo bien hecho que siempre ha demostrado Cristina Sánchez, la seriedad y exigencia en su labor, y fundamentalmente, un ejercicio del periodismo como una auténtica vocación cristiana, que traslucen las informaciones religiosas y sociales que Cristina firma semanalmente en el semanario Alfa y Omega y sus colaboraciones en COPE, entre otros medios. La premiada ha demostrado una excepcional sensibilidad social y solidaria en el ejercicio de su profesión, dando voz a aquellos que no la tienen por encontrarse en situación de pobreza y exclusión. Es especialmente notable el compromiso de Cristina Sánchez con el Tercer Mundo y su realidad, que lleva a sus informaciones, pero también a su compromiso activista, organizando acciones que contribuyan a mejorar la vida de aquellos que sufren. Ha viajado a diversos países como Nicaragua, Perú o Malawi, para colaborar en diversos proyectos. Igualmente, en España, colabora con el Banco de Alimentos en labores comunicativas. Por todos estos motivos, a los que se suma una intensa trayectoria periodística en diversos medios y gabinetes de prensa, teniendo en cuenta su juventud, se ha hecho merecedora del Premio Lolo.

Cristina Sánchez Aguilar se licenció en periodismo, publicidad y relaciones públicas en la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid. Completó su formación con estudios de diseño gráfico. Fue redactora de informativos en Popular TV, y colaboradora del semanario Alba. Igualmente, entre 2006 y 2008, trabajó para el gabinete de prensa de la Delegación de Medios de Comunicación Social del Arzobispado de Madrid. Posteriormente, asumió la dirección del Departamento de Comunicación de la Fundación Altius-Universidad Francisco de Vitoria, siendo también responsable de comunicación y voluntariado del Centro Hispano-Centroamericano gestionado por esta misma fundación. Desde febrero de 2010 es redactora del semanario Alfa y Omega, especializada en temas de justicia social, arte y cultura, y desde 2005 viene colaborando en diversos programas de la Cadena COPE, como El Espejo de fin de semana, A grandes trazos, El espejo de la Iglesia en Madrid, La Noche y La Mañana de COPE en la Comunidad de Madrid. Es también redactora jefe de la revista anual del Banco de Alimentos de Madrid, y directora y co-creadora de la web de crítica teatral www.hoyenlacity.com.

Su compromiso con el periodismo social le llevó a impulsar y a ser coordinadora académica del Máster en Periodismo Social de la Universidad CEU San Pablo y la Fundación Crónica Blanca desde el año 2011. En este máster imparte también clases de fotoperiodismo. Su vocación por lo social le ha llevado a viajar a Nicaragua, donde contribuyó a la creación de un comedor social, y a Perú, donde colaboró con una casa-hogar de misioneras. En Malawi, ha colaborado con el proyecto Kusekerera, para recaudar fondos para un orfanato de las Misioneras de María Mediadora. Este compromiso social y el llevarlo a sus informaciones con una verdadera visión cristiana le valió el Premio de Prensa 2011 de Manos Unidas.