El deseo de Benedicto XVI - Alfa y Omega

El deseo de Benedicto XVI

Redacción

El Año de la fe ha recordado dos fechas decisivas para el presente y futuro de la Iglesia católica: el 50 aniversario de la inauguración del Concilio Vaticano II (11 de octubre de 1962) por parte de Juan XXIII, quien será proclamado santo en abril, así como el vigésimo aniversario del Catecismo de la Iglesia católica. Con este año, los dos Papas han pedido a los bautizados estudiar y reflexionar sobre los documentos del Concilio Vaticano II y el Catecismo para dar razones a su fe, a su esperanza y a su amor.

El primer Año de la fe había sido convocado entre el 29 junio de 1967 y el 29 junio de 1968 por el Papa Pablo VI. Escogió esa fecha precisamente para recordar la memoria del martirio de Pedro, que la Iglesia revive en ese día. Al encontrarse con 300 voluntarios que, en este año, han acogido a los más de ocho millones de peregrinos que han visitado la tumba de san Pedro en el Año de la fe, el Papa Francisco sintetizó, este lunes, así la herencia que deja esta iniciativa: «Hablamos mucho de pobreza, pero no siempre pensamos en los pobres de fe: hay tantos. Hay muchas personas que tienen necesidad de un gesto humano, de una sonrisa, de una palabra verdadera, de un testimonio que les permita experimentar la cercanía de Jesús». En este sentido, se puede decir que el Año de la fe no concluye, más bien, comienza ahora.