«Soy Bergoglio, te llamo para saludarte y desearte un feliz cumpleaños»

El Papa Francisco sigue sorprendiendo al mundo por su humildad y naturalidad. Su elección como 266 sucesor de san Pedro no ha cambiado a Bergoglio, que en menos de una semana como Sumo Pontífice ha llamado en diversas ocasiones a su tierra natal, Argentina, para cancelar algunos servicios que tenía contratados, saludar a viejos conocidos y pedir oraciones por él.

La última llamada se produjo el pasado 24 de marzo, domingo de Ramos, cuando el Papa Francisco llamó por teléfono a un amigo, Gustavo Vera, para saludarlo y felicitarlo por su 49 cumpleaños. Todos los años, el cardenal Bergoglio llamaba a Gustavo por su cumpleaños, costumbre que ha querido mantener tras su elección con Santo Padre.

Gustavo Vera no pudo contestar a ninguna de las tres llamadas realizadas por el Papa. «El aparato no funciona muy bien y no escuché el llamado. A esa hora, además, iba a la Plaza de Mayo, y con el ruido de los bombos disminuyeron aún más mis posibilidades de oír el ringtone [melodía de llamada]», aseguró Vera al diario argentino Clarín. Ante la imposibilidad de la conexión, el Papa dejó un mensaje en el contestador de Gustavo: «Gustavo, soy Bergoglio, te llamo para saludarte y desearte un feliz cumpleaños. Un abrazo».

Vera, titular de la Fundación La Alameda dedicada a la lucha contra la esclavitud laboral, el trabajo infantil y la trata de personas con fines de explotación sexual, reveló al diario Clarín que lleva cinco años de estrecha relación con el cardenal, cinco años «de trabajo intenso y contención a las víctimas». El ahora Papa celebró varias Misas en la sede de la Fundación y bautizó a varios hijos de víctimas.