Se armó el belén... en el cole - Alfa y Omega

Se armó el belén... en el cole

Redacción
El gremio de los carpinteros, durante el belén viviente del año pasado. Foto: Colegio San Juan Bautista

¿Os imagináis que, de repente, vuestro colegio se llenara de hebreos, mercaderes, lavanderas, animales, e incluso estuviera allí la Sagrada Familia con el Niño Jesús? Es lo que va a ocurrir en el colegio de los salesianos en Burriana (Castellón) este martes, cuando los alumnos y profesores de Infantil y Primaria aprovechen el último día antes de vacaciones para organizar en todo el recinto un gran belén viviente. El director, Fernando Miranda, nos cuenta que «cada clase asume un papel: los niños de Infantil crean, entre todos, una granja en la que hay corderitos, pollitos, vacas… y cada clase canta un villancico. Las clases de Primaria se dividen por gremios: panaderos, artesanos, hilanderas, lavanderas…».

También hay mercaderes de verdad, niños que se encargan del mercadillo solidario y venden manualidades, comida y bebidas en casetas que les deja el Ayuntamiento. Eso es lo que este año le toca a hacer a Lucía, de 6º de Primaria. «También toco la flauta en la zambombada, cuando cantamos villancicos, y bailo con la clase de flamenco —nos dice—. Es muy bonito, parece que estamos en otro sitio, y me ayuda a vivir la Navidad».

Por último, los alumnos de 5º y 6º representan la historia de la Navidad. Entre ellos, está Pepe, de 5º: «Soy un ángel narrador. Empezamos a prepararnos a finales de octubre. Me tengo que aprender un texto con toda la historia de la Navidad, pero lo llevo bastante bien. Ahora me fijo más en todo lo que pasa en estas fechas».

Muchos de los profesores se visten y participan en el belén con sus alumnos. Los padres no, pero el día de la representación llenan el colegio. Y también ayudan con los preparativos. Por ejemplo, «el padre de un niño tiene una empresa de andamios y nos deja uno para hacer el palacio de Herodes», explica Fernando. Además, «los jóvenes de un instituto cercano que estudian para ser artistas falleros [los que hacen las famosas fallas de Valencia] cada año nos hacen un decorado».

Fernando cree que «el belén viviente se acerca más al sentido de la Navidad que si solo haces un festival de villancicos. Intentamos ayudar a los niños a ponerse en la piel de los personajes que vivieron en la época de Jesús y que, sin saber muy bien lo que pasaba, vivieron la alegría del nacimiento del Niño. Por eso pedimos a los chicos que ese día sean amables y no se enfaden, sino que colaboren entre ellos. No se trata de que solo salga bien lo tuyo, sino de que todo el colegio transmita un mensaje de amor en Navidad».