La Asamblea del Consejo de Europa acusa al Daesh de genocidio - Alfa y Omega

La Asamblea del Consejo de Europa acusa al Daesh de genocidio

Los ataques del Daesh contra minorías religiosas como los cristianos o los yazidíes han empujado a la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa a acusar a esta organización terrorista de genocidio. Esta resolución exhorta a todos sus países miembros y aliados –incluidos los de la costa sur del Mediterráneo– a hacer todo lo posible para evitar que sus ciudadanos participen en las actividades de los islamistas

Grégor Puppinck

El 27 de enero la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (Estrasburgo) ha adoptado, de forma casi unánime, una resolución que reconoce que «los individuos que actúen en nombre de la entidad terrorista que se llama a sí misma Daesh» «han perpetrado actos de genocidio y otros graves crímenes punibles bajo el Derecho internacional». En esta resolución, titulada Luchadores extranjeros en Siria e Iraq 2091 (2016), la Asamblea continúa que «los estados deberían actuar bajo la presunción de que el Daesh [ISIS] comete genocidio y deberían ser conscientes de que esto conlleva acción bajo la Convención de las Naciones Unidas para la Prevención y el Castigo del Crimen de Genocidio de 1948» (art. 2). La Asamblea también «recuerda que bajo el Derecho internacional los estados tienen una obligación positiva de prevenir el genocidio, y por tanto deberían hacer lo máximo posible para evitar que sus propios ciudadanos tomen parte en tales actos» (art. 3).

La Asamblea llama a sus 47 estados miembros además de a sus observadores y estados socios (incluidos los estados del Mediterráneo) a, entre otras cosas, «cumplir sus obligaciones positivas bajo la Convención de las Naciones Unidas para la Prevención y el Castigo del Crimen de Genocidio de 1948 tomando todas las medidas necesarias para evitar el genocidio».

La enmienda que sustenta el reconocimiento del genocidio ha sido ampliamente apoyada, adoptada por 109 votos a favor y seis en contra (entre los cuales tres son parlamentarios turcos).

Las implicaciones

El «crimen de genocidio» tiene una definición precisa en la ley internacional: implica crímenes «cometidos con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso». Por lo tanto es evidente que los cristianos iraquíes y yazidíes en Irak son víctimas de genocidio.

Según el Derecho internacional, el reconocimiento de un «crimen de genocidio» impone a los estados y a la comunidad internacional la obligación de actuar para impedirlo, para defender a las comunidades atacadas y para juzgar y castigar a los responsables. También es punible el intento, la conspiración o la incitación a cometer genocidio. Por tanto, cualquier individuo, organización o estado, dondequiera que esté –incluido en la UE y en los Estados Unidos– debería ser procesado penalmente tan pronto como promuevan públicamente estos crímenes o sean cómplices de ellos.

El reconocimiento del genocidio es, por tanto, un primer paso fundamental para conseguir que la comunidad internacional actúe.

La semana que viene, en el Parlamento Europeo

Pieter Omtzigt, el ponente del Comité de Asuntos Legales y Derechos Humanos, que abogó por el reconocimiento del «genocidio» explica que este es importante porque la Convención de la ONU de 1948 sobre genocidio obliga a los países a tomar medidas para frenarlo. «Una de las medidas que los países deben tomar es impedir a sus propios ciudadanos que viajen a Raqqa y se conviertan en miembros de la organización que comete genocidio». Omtzigt precisa que «en varios países europeos la pertenencia a una organización terrorista (como el Daesh) es una ofensa y las autoridades pueden encarcelar a la gente solo por eso». Por tanto, el reconocimiento del genocidio no solo obliga a los estados a luchar contra este terrorismo, incluyendo en su propio territorio, sino que también facilita esta acción.

El 4 de febrero, el Parlamento Europeo votará sobre esta misma cuestión. Durante el reciente debate sobre «la masacre sistemática de minorías religiosas por el grupo Estado Islámico», la alta representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, la señora Federica Mogherini, evitó usar el término de genocidio.

Algunos gobiernos y Parlamentos ya reconocen este genocidio. Ha llegado el Momento de que las instituciones europeas y las Naciones Unidas hagan lo mismo.