Cañizares instituye los premios A la Mujer Comprometida

El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha instituido los premios en reconocimiento A la Mujer Comprometida, que ha entregado este martes, 8 de marzo, con motivo de la celebración del Día Internacional de la Mujer, según han informado ayer a la agencia AVAN fuentes del Arzobispado.

Este acto, que ha tenido lugar en el Salón Gótico del Palacio Arzobispal, «es un homenaje a mujeres que destacan por una vida de entrega personal y profesional en distintos ámbitos de la sociedad civil valenciana», según las mismas fuentes.

Las premiadas en esta primera edición han sido Pilar Roig Picazo, catedrática responsable del Departamento de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de la Universitat Politècnica de València (UPV) y directora de más de 35 tesis doctorales; Mar Sánchez Marchori, directora del Instituto Valenciano de Pedagogía Creativa; y Presen Rodríguez, diseñadora que ha desarrollado su labor personal y profesional en Valencia, cofundadora de la Pasarela de El Carmen cuya trayectoria fue reconocida por el IVAM hace dos años en una exposición.

Los nombres de las tres premiadas han sido propuestos al cardenal por una comisión creada para la organización de estos premios que se entregarán anualmente.

Además, en el acto de este martes de reconocimiento A la mujer comprometida se ha rendido un homenaje a las cuatro religiosas asesinadas en Yemen la pasada semana, de la congregación Misioneras de la Caridad, que se dedicaban al cuidado de ancianos, según las mismas fuentes.

El pasado viernes, cuatro religiosas Misioneras de la Caridad, la congregación fundada por la Beata Madre Teresa de Calcuta, fueron asesinadas junto a otras doce personas –varios de ellos ancianos-, por presuntos terroristas que ingresaron a su convento de Aden (Yemen), donde se encuentra el albergue de ancianos que administran las monjas.

La agencia vaticana Fides informó que además de las religiosas, también han sido asesinados el chofer y al menos otros dos colaboradores de la comunidad. De las monjas que murieron en el ataque, dos eran de Ruanda, una de la India y otra de Kenia.

El asalto, al parecer, fue perpetrado por extremistas que acusan a la congregación de hacer, con su ayuda a ancianos y enfermos, proselitismo cristiano.