Una manzana fea cambia el sistema de producción - Alfa y Omega

Una manzana fea cambia el sistema de producción

Las ONG católicas de desarrollo lanzan una campaña sobre el cuidado de la creación para impulsar hábitos de consumo más sostenibles

Cristina Sánchez Aguilar
Foto: María Pazos Carretero

Un empresario levantino puso en marcha una empresa de contrachapados en el Amazonas. «Las ceibas que poblaban las orillas del río fueron desapareciendo. Pocos años después la empresa cerró. Pero aquellas ceibas ya no volvieron a crecer». Jaime Palacio, secretario técnico de REDES, vivió durante años en aquella región. «Cuando conoces un poquito la selva ves cuánta capacidad tenemos los hombres de intervenir sobre nuestra casa común», afirma. «La deforestación masiva va acabando poco a poco con la riqueza natural», casa de muchos indígenas obligados a abandonar su tierra en la más absoluta pobreza. Los cultivos para exportación «ocupan miles de hectáreas que dejan la tierra infértil» para los agricultores originarios. El agua está contaminada «por los vertidos de las grandes petrolíferas», provocando enfermedades a los vecinos de la zona.

Existen grandes problemas ambientales. Están relacionados con la pobreza y la desigualdad. Y todo esto tiene mucho que ver con los modos de vida de la población occidental. Para que estas tres máximas penetren en la sociedad española, las organizaciones de la Iglesia católica Cáritas, CONFER, Justicia y Paz, Manos Unidas y REDES, inspiradas en la Laudato si, han unido fuerzas durante los próximos dos años en la campaña Si cuidas el planeta, combates la pobreza, presentada el martes en Madrid y enmarcada en la iniciativa Enlázate por la justicia, que desde 2012 agrupa estas cinco entidades de la Iglesia.

La campaña se basa en «una lectura de la realidad desde el Evangelio, pero puede encontrar acogida en amplios sectores de la sociedad, sea cual sea la creencia o la condición política», explicó Palacio en la presentación. Como respuestas inmediatas, los organizadores proponen acudir a comprar productos a las redes de comercio justo. «Si exigimos saber de dónde vienen o cómo se producen los alimentos, se generará un cambio en el modelo productivo». Otra propuesta es evitar el desperdicio. «En España, el 40 % de los alimentos desperdiciados proceden de los hogares. No tirar esa comida marca una gran diferencia. También es importante no descartar en el mercado las piezas que no gusten por su aspecto o tamaño. Si compramos una manzana fea, el productor no la tirará», añaden desde REDES.

Como guía de la campaña utilizarán un decálogo con puntos que se reflexionarán cada dos meses. Por ejemplo, en septiembre y octubre –fecha de inicio del proyecto– se «apoyará la causa de los pobres». En noviembre y diciembre «redescubriremos el valor de la simplicidad en nuestra vida» y así hasta abril de 2018.Más información en www.enlazateporlajusticia.org

Si cuidas el planeta, combates la pobreza

Estos días celebramos el primer aniversario de la encíclica Laudato si. Su publicación ha tenido un gran impacto político y social, y ha ocupado un lugar muy relevante en las reflexiones y decisiones de la comunidad internacional, que precisamente en el 2015 aprobaba en Nueva York la nueva agenda 2030 para el desarrollo sostenible, y llegaba en París a un acuerdo histórico sobre el cambio climático.

También ha sido motor de inspiración para muchas organizaciones de Iglesia. Enlázate por la Justicia es el espacio en el que confluyen organizaciones católicas como Cáritas, Manos Unidas, Justicia y Paz, CONFER y decenas de ONG de desarrollo de congregaciones religiosas asociadas en REDES, y desde donde estos días lanzan una campaña conjunta con el lema Si cuidas el planeta, combates la pobreza. Y no es casualidad. Laudato si ha puesto sobre la mesa asuntos clave para transformar nuestro mundo y nuestra manera de luchar contra la pobreza. Se trata por un lado de resaltar que la pobreza y el deterioro ambiental no son dos asuntos aislados o inconexos, sino que son las dos caras de la misma moneda.

Difícilmente acabaremos con la pobreza y el hambre si al mismo tiempo no luchamos contra el deterioro ambiental y la explotación irracional de los recursos naturales. Por otra parte, la campaña pone en evidencia que todo cambio hacia un mundo más justo y sostenible pasa necesariamente por el compromiso personal. Nuestros patrones de producción y consumo, nuestras actitudes, valores y estilo de vida forman parte de este modelo de desarrollo ambientalmente insostenible y profundamente injusto en la distribución de la riqueza.

Durante los próximos dos años esta campaña pretende aumentar la sensibilidad de nuestra comunidad eclesial sobre las cuestiones ambientales y su relación con la justicia, promoverá estilos de vida más justos y sostenibles y emplazará al Gobierno a realizar los cambios necesarios para ello, especialmente cumpliendo los compromisos firmados sobre la Agenda 2030 y el cambio climático. El éxito de esta campaña depende de su capacidad para generar cambios y compromisos. Así que el mensaje es claro: Haz tu parte, ¡enlázate por la justicia!

Marco Gordillo
Coordinador de campañas de Manos Unidas