El riesgo de ser sacerdote en México - Alfa y Omega

El riesgo de ser sacerdote en México

Con el título El riesgo de ser sacerdote en México, la plataforma Centro Católico Multimedial ha documentado los asesinatos en el último cuarto de siglos contra sacerdotes y otros miembros de la Iglesia en este país

Carlos Villa Roiz

La unidad de investigación del Centro Católico Multimedial, CCM, dio a conocer su reporte anual 2014, sobre sacerdotes, religiosos y laicos, que han perdido la vida en México, a causa de su eficaz actividad pastoral y su sentido de absoluta fidelidad a Cristo y a su Iglesia.

Bajo el título: El Riesgo de ser Sacerdote en México, y que puede ser consultado en la página web del CCM, se llega a las siguientes conclusiones:

1- Durante los últimos 24 años, han sido perpetrados 47 atentados contra miembros de la Iglesia Católica, de los cuales 45 son crímenes arteros; y 2 corresponden a sacerdotes que siguen en calidad de desaparecidos.

2- La lista de los agentes pastorales que han perdido la vida de modo violento de 1990 a 2014, la encabeza 1 cardenal, 34 sacerdotes, 1 diácono, 3 religiosos, 5 laicos y una periodista católica.

3- En los dos primeros años de la administración del gobierno del Lic. Enrique Peña Nieto, se tiene registro de 8 sacerdotes asesinados, y dos aún continúan desaparecidos.

4- La tendencia de atentados contra sacerdotes sigue al alza: se registra un aumento de un 100 %, al cierre de 2014, comparado contra el segundo año de gestión del sexenio pasado.

5- Cotejando los números, el fenómeno ha ido aumentado, en el caso de México subió un 300 % el índice de secuestros de sacerdotes.

6- El balance, tan sólo en 2014, indica que han sido perpetrados 4 crímenes contra agentes de Pastoral mexicanos, de los cuales 3 asesinatos corresponden a sacerdotes, y un atentado fue cometido contra un laico que acompañaba a presbítero; este último, logró sobrevivir a tiroteo, luego del intento fallido de secuestro.

7- En los últimos 12 meses, dos sacerdotes adscritos a la Arquidiócesis de Acapulco, Guerrero, pagaron con su vida al ser levantados y secuestrados por grupos violentos de la entidad. Gran dolor han causado estos magnicidios a fieles de la diócesis de Ciudad Altamirano, Guerrero y a la Iglesia de México en general.

8- Otro presbítero que pertenecía a la Diócesis de Atlacomulco, estado de México, fue asesinado cuando se perpetraba un robo en el templo del cual era párroco.

9- Afortunadamente 3 sacerdotes fueron rescatados: uno de la Diócesis de Apatzingán, estado de Michoacán, uno más de la Diócesis de Ciudad Altamirano, Guerrero y un sacerdote de la Arquidiócesis de Xalapa, que fue víctima de un secuestro exprés.

10- En relación a los templos sagrados se tienen contabilizados agravios que se acercan al sacrilegio. Este rubro remontó el porcentaje de 100 % de los robos a templos sagrados, comparado contra el periodo del Lic. Felipe Calderón.

Un ejemplo de lo anterior sucedió el 23 julio de 2014 cuando elementos de la marina nacional con un grupo de agentes del ministerio público federal, irrumpieron violentamente un templo de la Diócesis de Apatzingán, estado de Michoacán, así lo hizo saber el señor obispo Miguel Patiño en un escrito dirigido al Secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong.

11- Los datos aquí expuestos, señalan lamentablemente, a la República Mexicana como el país latinoamericano más peligroso para ejercer el ministerio sacerdotal hoy en día. Si vemos el fenómeno en perspectiva histórica, el panorama para 2015 no es alentador para el sector religioso.

12- Esto nos permite ver que los agentes de pastoral en México son cada vez más vulnerables a la creciente ola de agresión, asesinatos y desapariciones forzadas, puesto que las autoridades les brindan poca o nula protección contra atentados, sobre todo, en las zonas de alto riesgo donde prolifera la inseguridad y operan los grupos del crimen organizado.

13- Recientemente el Episcopado mexicano y sacerdotes de diversas diócesis del país han expresado un rotundo ¡Basta ya!… y han señalado, «No queremos más sangre», demandan a participar para construir una nación en la que se valore la vida, dignidad y derechos de indígenas, migrantes, mujeres, niños, jóvenes y ancianos para restaurar la justicia y paz del país.

Carlos Villa Roiz / SIAME / Archidiócesis de México

Relación general de homicidios perpetrados contra Sacerdotes de 1990 hasta 2014

1990

El Padre Guillermo Madrigal Arias, de 46 años de edad, fue victimado la madrugada del 10 de diciembre de 1990, junto con el matrimonio formado por Rigoberto Betancourt Bejarano y Lilia Sánchez de Betancourt, de 26 y 25 años de edad, en la región fronteriza de Ciudad Juárez, informó la Policía Judicial del Estado. El parte policial no refiere más datos del lugar del múltiple homicidio.

1993

Cardenal mexicano Juan Jesús Posadas Ocampo, asesinado en el aeropuerto de Guadalajara, el 24 de mayo de 1993. La tesis oficial, en ese entonces fue que al Cardenal «lo confundieron» con un alto Jefe del crimen organizado; sin embargo, algunas fuentes señalan que las últimas investigaciones coinciden con el Cardenal Sandoval Iñiguez, de que se trató de un «homicidio de Estado». (Caso aun sin resolver).

Padre Abelardo Espinoza Aguilera, de la Diócesis de Apatzingán, Estado de Michoacán.

1994

Fray Abdias Díaz, de la Orden de los Misioneros de Guadalupe, atacado con lujo de violencia el día 2 de diciembre de 1994, en el sur de la Ciudad de México; No se conocen datos del móvil de homicidio.

1995

Padre Miguel Marzán Arriola, de la Diócesis de Apatzingán, Estado de Michoacán.

1998

Padre Mauro Andrés Ortíz Carreño, brutalmente asesinado la noche del miércoles 6 de Mayo de 1998, en la comunidad del templo de Nuestra Señora de la Nieves, en Antequera, estado de Oaxaca.

2000

Padre José Ignacio Flores Gaytán, asesinado el 17 de enero del año 2000, en la ciudad de Torreón, estado de Coahuila; reporte de autoridades locales señalan que el móvil fue robo.

2004

Padre Ramón Navarrete Islas, de 56 años, asesinado con arma blanca el 7 de julio en la diócesis de Ciudad Juárez, Chihuahua.  Reportes de autoridades locales señalaron el robo como móvil.

Padre Macrino Nájera Cisneros, de 42 años, fue asesinado el 25 de octubre en Jilotlán, Jalisco.  El padre defendió a una niña durante una fiesta de 15 años.  El asesino lo mató junto a otras dos personas.

2005

Padre Manuel Delgado, de 42 años, asesinado el 6 de febrero, era vicario del templo de Cristo de Burgos, Ciudad Jiménez, Chihuahua.  Su cuerpo fue encontrado con indicios de tortura.

Padre Luis Velázquez Romero, de 51 años, fue asesinado el 25 de octubre; su cuerpo fue encontrado en la cajuela de un automóvil, tenía las manos atadas.  El sacerdote era Juez del Tribunal eclesiástico diocesano de Tijuana, BC.

2006

Diácono Juan Francisco Castrejón, de 34 años, del D. F., fue asesinado el 27 de febrero cuando iba circulando a bordo de su automóvil. El delincuente le dio dos balazos. Se desconoce el móvil del asesinato.

2007

Misionero Ricardo Junious Sanders, de 76 años, asesinado el 28 de julio dentro de la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe en la Colonia San Rafael, Ciudad de México.  El sacerdote trabajaba con drogadictos y alcohólicos. Fuentes cercanas a los Caballeros de Colón aseguran que el padre denunció varios giros negros de su demarcación.

Padre Fernando Sánchez Durán, de 68 años, fue secuestrado y asesinado en el mes de julio en Santiago Tlatepoxco, Tepeji del Rio, Querétaro.

Padre Humberto Macías Rosales, de 52 años, fue asesinado en 1 de mayo en el interior de su automóvil.  Era párroco del templo Nuestra Señora de la Luz en Aguascalientes.

2008

Padre Julio César Mendoza Acuña, de 33 años, fue atacado por dos sujetos y asesinado el 2 de mayo.  Era párroco de la iglesia Nuestra Señora de Fátima, Venustiano Carranza, DF.

Padre Gerardo Manuel Miranda Ávalos asesinado el 2 se septiembre  presuntamente a manos de sicarios de La Familia Michoacana.  Era director del instituto Fray Juan de San Miguel, Los Reyes, Michoacán.

2009

Padre Habacuc Hernández Benítez asesinado el 13 de junio, acribillado con los seminaristas Eduardo Oregón y Silvestre González, mientras viajaban en una carretera.  El asesinato fue en Arcelia, Guerrero. Se desconoce el móvil del asesinato.

Padre Eduardo Oidor Hernández, de 42 años, asesinado el 6 de febrero de 2009, con arma blanca en la zona limítrofe entre Puebla y Tlaxcala. Atentado en la carretera Atlixco.

2010

Padre José Luis Parra Puerto, de 50 años, asesinado el 27 de abril por dos individuos que los interceptaron al salir de una reunión. Su cadáver fue encontrado al interior de una camioneta en el municipio de Nezahualcóyotl, Estado de México.  Era el vicario del templo de Asunción Sagrario Metropolitano, de la Ciudad de México.

Padre Florentino Carmona Méndez, de 67 años, asesinado el 27 de abril por contusiones múltiples.  El móvil según autoridades locales, fue robo a la parroquia del Espíritu Santo de Xalapa, Veracruz.

Padre Carlos Slavaro Wotto, El padre tenía 83 años.  Lo torturaron y lo asfixiaron.  Los asesinos saquearon la casa parroquial.  El sacerdote era párroco del templo de Nuestra Señora de las Nieves, en Antequera, Oaxaca.

Hermano Francisco Escamilla Sánchez director del colegio Instituto Marista México, de 42 años, asesinado el 2 de febrero. Fuentes cercanas a la víctima aseguran que se enfrentó a una mafia que obligó a las escuelas particulares del DF a contratar el servicio de camión obligatorio. El móvil de asesinato es confuso pero algunos elementos apuntan a una denuncia de fraude por 10 millones de pesos.

2011

Padre Santos Sánchez Hernández, de 43 años, asesinado el 22 de febrero al interior de la casa parroquial de Mecapala, Puebla.  Autoridades locales señalas al robo como móvil.

Padre Marco Antonio Durán, de 48 años, murió por «una bala perdida» durante un enfrentamiento entre policías y un grupo criminal el 2 de julio.  El presbítero se desempeñaba como párroco de la Iglesia de San Roberto Belmarino, Matamoros, Tamaulipas.

Padre Salvador Ruíz Enciso, 55 años, asesinado el 22 de mayo. Fuentes cercanas manifestaron que el padre  realizó varías denuncias contra delincuentes que operaban cerca de parroquia Divino Rostro de Jesús, en la comunidad La Mesa, BC.

Padre José Francisco Sánchez Durán, 60 años, asesinado el 26 de abril. Según autoridades locales el móvil fue robo con arma blanca. El sacerdote se encargaba de la iglesia Patrocinio de San José, de la Colonia Educación, Coyoacán, DF.

La periodista católica María Elizabeth Macías Castro, de 39 años, del movimiento Scalabriniano de Nuevo Laredo, Tamaulipas. Fue secuestrada y luego brutalmente asesinada y mutilada. La comunicadora prestaba un servicio social a través de las Redes Sociales a favor de la comunidad de Nuevo Laredo, motivo por el cual un grupo delincuentes del crimen organizado truncó su vida.

El Sacristán, Luis Miguel Islas de 54 años, se desempeñaba en al Iglesia del pueblo de la Conchita, de Zapotitlán, Delegación Tlahuac, Distrito Federal. Fue asesinado por 5 impactos de bala en la cabeza, por un sujeto que intento robarle la camioneta en que trasportaba artículos religiosos. La policía ministerial confirmó, en primera instancia, que el ataque directo y certero apunta que fue en un intento de despojo de vehículo.

2012

Padre Teodoro Mariscal Rivas asesinado de 45 años, originario de Tala, Jalisco, fue asesinado entre el 18 0 19 de septiembre. Se encontraron en su cuerpo indicios de tortura y asfixia. Se desconoce el móvil. Estaba a cargo de la iglesia de Santa Cecilia en Mochicahui, Sinaloa.

Padre Gerardo Ávila, de 64 años, asesinado el 28 de enero. Párroco de la iglesia de la Inmaculada Concepción, en Villas de la Hacienda en Atizapán, se encontraron en su cuerpo indicios de tortura. Autoridades locales señalan al robo como móvil.

Padre Victor Manuel Diosdado Ríos, Diócesis de Apatzingán, su trabajo pastoral incomodó a varios criminales, lo que costó la vida. 2012.

El Sacristán Laico, Miguel Ángel López, de 45 años, fue asesinado con arma punzo cortante, al interior de la parroquia de Nuestra Señora de Lourdes el 23 de enero de 2012. El evento trágico fue perpetrado en la iglesia ubicada en el barrio de Tierra Blanca, de la Arquidiócesis de Durango. Según las investigaciones, el sacristán fue tomado por sorpresa, su agresor lo atacó por la espalda. Las investigaciones continúan para confirmar la causa del homicidio.

2013

Padre José Flores Preciado fue asesinado el 5 de febrero dentro del templo de Cristo Rey en Colima, murió en el hospital. Los delincuentes arribaron el templo Cristo Rey cerca de las 11 de la noche del martes para asaltar el templo, pero se percataron que aún se encontraba el sacerdote en el lugar, quien se encontraba dormido, por lo que fue sometido y golpeado.

Flores Preciado quedó herido y con traumatismo craneoencefálico hasta que varios seminaristas llegaron al lugar, después de más de una hora, y pidieron auxilio a las autoridades, más tarde vendría su fallecimiento en el Hospital Regional Universitario, a donde había sido trasladado para recibir atención médica.

Padre Ignacio Cortez Álvarez fue asesinado el 22 de julio. La Procuraduría General de Justicia de Baja California, informó que el móvil fue robo con violencia. El padre era responsable de la parroquia María Auxiliadora en el municipio de Ensenada.

Padre Hipólito Villalobos Lima, de 45 años, y el vicario P. Nicolás de la Cruz Martínez, de 31 años,  fueron encontrados muertos en la Parroquia de San Cristóbal, en el municipio de Ixhuatlán de Madero, en el estado de Veracruz el 29 de noviembre. La diócesis de Tuxpan dice que la zona es controlada por cártel de Jalisco Nueva Generación y Los Zetas.

Padre Joel Román Salazar, de la Diócesis de Ciudad Altamirano, Guerrero, muerte repentina porque fue despeñado en su vehículo con premeditación, alevosía y ventaja. Falleció el 10 de diciembre de 2013.

2014

Misionero P. John Ssenyando de origen Ugandés, trabajaba en la Diócesis de Chilpancingo- Chilapa, Guerrero. Fue levantado y secuestrado en el poblado de Nejada, Guerrero, el 30 de abril de 2014. Fue encontrado en fosa común, el 28 de Octubre de 2014 en la comunidad de Cocula, Guerrero.

Padre José Ascensión Acuña Osorio, de 37 años de edad, levantado y secuestrado el 21 de Septiembre de 2014, fue encontrado en el río Balsas, el 23 de Septiembre, muy cerca del pueblo de Santa Cruz de Las Tinajas, en el municipio de San Miguel Totolapan (región de Tierra Caliente de Guerrero).

Padre Rolando Martínez Lara, párroco del templo de Santa María de Guadalupe, Canalejas, Jilotepec estado de México; fue objeto de un robo a parroquia perpetrado el crimen contra el sacerdote, durante la madrugada del miércoles 19 de febrero de 2014.

Nicolás Carrillo Vargas, laico quien acompañaba en calidad chofer al Sacerdote José Damián Hernández Veloz, párroco de Villa Nicolás, Diócesis de Ciudad Altamirano, Guerrero. El Padre José Damián Hernández Veloz, logró sobrevivir a tiroteo, luego de intento fallido de secuestro, cuando fueron sorprendidos el 20 de febrero de 2014, al circular cerca de San Antonio de los Libres, municipio de Ajuchitlán del Progreso, Guerrero.

Hasta aquí los registros, y ante la gravedad, resumimos que la Iglesia Católica en México confronta serias dificultades para ejercer la propagación del Evangelio en distintas zonas geográficas del país, además se siente profundamente golpeada e indignada ante la violencia contra sus hijos cuya vida ha sido truncada.

Así lo indican los datos analizados. Los ataques contra religiosos tienen un fuerte olor a intolerancia. Son definitivamente rechazables todas esas agresiones, sobre todo, las que se llevan a cabo directamente en las parroquias, así como en la calle; lo que en algunos casos terminan en homicidios.

No por nada, «cuando asesinan a un sacerdote se lastima a la comunidad, se lastima a la Iglesia y se lastima a la sociedad, porque es un líder que está al servicio de la gente», dijo el Padre Alan Camargo, vocero de la diócesis de Matamoros.

En suma, los casos de homicidios contra sacerdotes y laicos ocurridos en México durante 1990 y 2014, ponen el dedo en la llaga, al señalar que poco se ha hecho por esclarecer los magnicidios de sacerdotes, religiosos y laicos caídos en cumplimiento de su ministerio sacerdotal.

Aún estamos a tiempo de corregir el fenómeno; por ello, urgen reformas para proteger a los religiosos de México, cualesquiera sea su denominación o credo.

Centro Católico Multimedial