El padre Ángel se lleva a los sin techo al Ritz - Alfa y Omega

El padre Ángel se lleva a los sin techo al Ritz

El padre Ángel, fundador de Mensajero de la paz, participó este martes en un desayuno informativo

Fran Otero
Javier Fernández y el padre Ángel en el Foro Nueva Economía

El padre Ángel García, presidente de Mensajeros de la Paz y párroco de la parroquia madrileña de San Antón, aceptó rápidamente la invitación que José Luis Rodríguez, presidente de Nueva Economía Forum, le hizo para participar en uno de los foros que suelen celebrar en el Hotel Ritz de Madrid a primera hora de la mañana. La aceptó y luego le pidió si podía llevar a un grupo de invitados de honor al desayuno, los sin techos de San Antón.

Este martes 7 de febrero, el padre Ángel llenó dos salones del lujoso hotel para escucharle y muchos eran esos sin techo a los que se había atrevido a invitar. Los mismos a los que da las buenas noches todos los días y ve compartir mantas aunque haya para todos. Y junto a los sin techo, numerosas personalidades de la vida política, social y cultural de nuestro país, empezando por el presidente del Principado de Asturias, Javier Fernández, que fue el encargado de hacer la presentación. El dirigente socialista estuvo acompañado por compañeros de la formación como Patxi López, Margarita Robles, Purificación Causapié o Teresa Rodríguez. En Ciudadanos tampoco quisieron perderse al padre Ángel, al que escucharon Albert Rivera, Begoña Villacís, Ignacio Aguado y Marta Rivera de la Cruz.

El sacerdote asturiano, como él mismo dijo nada más comenzar, habló de los «divino y lo humano» y dejó alguna que otra frase para la reflexión. «Los refugiados no se mueren solo en Grecia, también se mueren en Cádiz», dijo en referencia al pequeño encontrado muerto en una playa gaditana. «Los migrantes no son ilegales; en todo caso, indocumentados», añadió al recordar una reciente conferencia del cardenal arzobispo de Tegucigalpa, Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga.

También habló de Donald Trump, de quien dijo que «no es posible que en las manos de una sola persona haya tanto poder». «Si sigue así, le cambiarán por las buenas o por las malas», en referencia a un posible «impeachment» o destitución.

El fundador de Mensajeros de la Paz tuvo en su boca continuamente palabras del Papa Francisco y le dijo a los interlocutores, muchos de ellos poco habituales en las Iglesias, «que un confesionario no es ni debe ser una sala de tortura», que la Iglesia pretende ser «un hospital de campaña para los descartados del sistema, para los heridos de la vida». También tomó del Papa Francisco sus palabras sobre la corrupción: «El pecado se puede perdonar; la corrupción, no».