Otra extraordinaria cosecha cinematográfica - Alfa y Omega

Otra extraordinaria cosecha cinematográfica

Alfa y Omega
Fotograma de Hasta el ultimo hombre. Foto: DeAPlaneta

El último año ha sido altamente fecundo en la producción de buen cine con valores y abierto a la trascendencia. Otro año más. Si en su anterior edición, los premios de cine Alfa y Omega se fijaron en películas como la caucásica Mandarinas, Little Boy (EE. UU.-México) o Ma Ma (del director Julio Médem), este año la lista de películas ganadoras compagina grandes producciones norteamericanas como Silencio (Scorsese) o Hasta el último hombre (Mel Gibson), con cintas españolas como Luz de Soledad o La historia de Jan. La oferta va en aumento temporada tras temporada, lo que seguramente significa que las productoras han comprendido que existe un nicho de mercando importante, y naturalmente también que no faltan creadores con sensibilidad hacia las grandes cuestiones de la existencia. No faltará nunca algún aspecto opinable en cualquiera de estas propuestas, pero cuando el mundo del arte se lanza a un honrado ejercicio de búsqueda del bien, la verdad y la belleza, lo que debe oír de la Iglesia no son reproches sobre las insuficiencias de sus propuestas, sino palabras de aliento y de agradecimiento que ojalá sirvan de acicate para que otros creadores intenten superar el listón. Listón que año a año va quedando más alto.