Los salafistas condenan los atentados en el Sinaí - Alfa y Omega

Los salafistas condenan los atentados en el Sinaí

María Martínez López
Un sacerdote consuela en Ismailía a una mujer copta que ha huido de la región de Sinaí del Norte. Foto: AFP PHOTO / Stringer

En la región egipcia del Sinaí del Norte, escenario frecuente de ataques de los yihadistas contra fuerzas del orden y turistas, una oleada de atentados reivindicados por el Daesh ha obligado a huir a un centenar de familias coptas hacia Ismailía, una ciudad a 120 kilómetros de El Cairo.

Entre las reacciones, un dato llamativo ha sido que el partido salafista Al-Nur ha condenado públicamente estos atentados contra cristianos, haciendo hincapié en que «van contra las enseñanzas del islam». También ha criticado los ataques la Casa de la Fatwa, organismo presidido por el gran muftí de Egipto, la máxima autoridad legal del país en lo concerniente a la ley islámica.

Los hechos ha coincidido con la visita a la Universidad Al-Azhar, de El Cairo, los días 25 y 26, de una delegación del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso para participar en un encuentro sobre el papel de ambas entidades frente a los fenómenos del fanatismo, el extremismo y la violencia en nombre de la religión. El comunicado final sitúa en la raíz de estos fenómenos la pobreza, la ignorancia y el abuso político de la religión, pero también la interpretación errónea de los textos sagrados.

El encuentro se producía como continuación de la histórica audiencia del Papa al gran imán de Al-Azhar, Ahmed al-Tayeb, el 23 de mayo de 2016. Se confirma así que la Iglesia espera que esta universidad –considerada la principal autoridad académica mundial del islam sunita– juegue un importante papel en la promoción del diálogo interreligioso, y también en la propia reforma interna del islam. El presidente egipcio, Abdel Fattah al-Sisi, hizo el año pasado un llamamiento similar a los docentes de esta universidad.

Marcha por la Paz en Irak

También en Irak, uno de los principales escenarios de la guerra contra el Daesh, «hay algo que se está moviendo», ha declarado a la agencia AsiaNews el patriarca caldeo Louis Raphael Sako. Cada vez se ven más intervenciones de políticos y otros líderes musulmanes que «condenan la mentalidad sectaria» y piden «un régimen civil que garantice la ciudadanía para todos».

Estas declaraciones han estado acompañadas de gestos, como el de los jóvenes voluntarios musulmanes que limpiaron en Mosul una iglesia recién liberada del control de los yihadistas. Otro ejemplo citado por el patriarca es el de toda la población de la zona de Teleskof, que participó unida en una Misa de acción de gracias presidida por el propio Sako, y en la erección de una gran cruz en una colina. «Finalmente se opta por construir puentes en lugar de alzar barreras», se felicitó.

La Iglesia caldea quiere aprovechar este clima, propiciado por la liberación de diversos enclaves en Mosul y la llanura de Nínive. Con este objetivo ha declarado 2017 como Año de la Paz, y planea sembrar la Cuaresma y la Pascua con iniciativas en este sentido. Durante toda la Cuaresma las comunidades cristianas recaudarán fondos para ayudar a los refugiados musulmanes que han huido de los combates en Mosul. Además, el Domingo de Ramos cristianos y mahometanos participarán durante todo el día en una Marcha por la Paz desde Erbil, en el Kurdistán iraquí, hasta Alqosh, en la llanura de Nínive. «Será una ocasión de fuerte unidad», ha afirmado el patriarca Sako. Por último, se celebrará un vía crucis que tendrá como estaciones diversas localidades liberadas del Daesh en los últimos meses, como Teleskof y Batnaya. A algunas de estas localidades –ha adelantado– podrían regresar los cristianos antes del final del curso.