El cardenal Rouco invita a los profesores universitarios a Misión Madrid

Como cada fin de curso, el arzobispo de Madrid, cardenal Antonio María Rouco Varela, se reunió el pasado 5 de junio, con un grupo de profesores universitarios de las distintas facultades presentes en la Archidiócesis. La cita, que ya se ha convertido en tradición, estuvo marcada este año por la proximidad, el próximo curso, del Año de la fe, convocado por el Papa y el proyecto de evangelización Misión Madrid. El cardenal animó a los profesores universitarios a involucrarse en esta iniciativa, pues «el objetivo de la nueva evangelización es importante tenerlo en cuenta a la hora de hacer misión y Universidad».

La Universidad —añadió— es un ámbito de especial relevancia por la crisis que vive, y que «no es sólo un fenómeno de España, sino europeo. Habría que preguntarse si también la crisis universitaria es una crisis antropológica, del alma y del espíritu, y si no habría que asumir la responsabilidad de los universitarios católicos».

Dentro de la misión de los universitarios católicos, está el recuperar la verdadera identidad de la Universidad, dijo, que «no nace en función del poder político», aunque sí ha tenido una dependencia «muy fuerte» con éste. De hecho, «hoy la Universidad sigue siendo concebida como un instrumento para ejercer poder sobre el hombre, la persona, a través de la transmisión de conocimientos, el desarrollo de la ciencia…».

Frente a esta tentación, «hay que poner la idea original, que es una transmisora del saber». Este proyecto de Universidad «al servicio del conocimiento de la verdad en todos los campos, sin excluir la luz de la fe, es el reto permanente del universitario marcado por la fe cristiana». En este sentido, se ha puesto en marcha desde la Delegación de Pastoral Universitaria un área denominada Veritatis Splendor, cuyos miembros son profesores universitarios y que pretende aunar esfuerzos para buscar juntos la verdad.

Después de la intervención del cardenal Rouco, los profesores que participaban en el encuentro pudieron presentarle sus preguntas e inquietudes. De cara a la misión en la universidad, por ejemplo, le plantearon la necesidad de hacer crecer la comunión entre distintas iniciativas y católicos pertenecientes a realidades diversas. La respuesta del cardenal Rouco fue que «crecer en la fe es lo primero», y que «todos los ámbitos de la vida universitaria tiene que estar centrados en la reflexión sobre la importancia de la fe».

Ante la cuestión de cómo transmitir los valores cristianos hoy, respondió que «lo importante es que uno se identifique plenamente, con toda su vida, con el sí a Cristo». En su opinión, «el profesor universitario tiene que vivir un poco martirialmente. Enseñar la verdad en ciertos temas es puro martirio y mostrársela a los alumnos así» y abogó por que los alumnos vean en que «hay coherencia» entre lo que dicen los profesores y cómo lo dicen.