El Vaticano procesa a dos exdirectivos del hospital Bambino Gesù por fraude - Alfa y Omega

El Vaticano procesa a dos exdirectivos del hospital Bambino Gesù por fraude

El Vaticano ha imputado al expresidente del hospital pediátrico Bambino Gesu, administrado por la Santa Sede, Giuseppe Profiti, y su extesorero, Massimo Spina, acusados de haber desviado parte de las donaciones para sufragar la reforma del ático en el que vive actualmente el exsecretario de Estado del Vaticano, el cardenal Tarcisio Bertone. Los dos procesados se sientan este martes, 18 de julio, en el banquillo de los acusados del tribunal de Roma

Redacción
Foto: ogginotizie.it

El cardenal Bertone no ha sido imputado por este caso. El portavoz oficial del Vaticano, Greg Burke, aclaró que por su condición de miembro del colegio cardenalicio no podría ser investigado por la justicia ordinaria; solo el Tribunal Supremo del Vaticano tiene competencia para abrir una investigación contra él.

Según la acusación, Profiti y Spina «han utilizado de manera ilegal, y a favor del empresario (Gianantonio) Bandera, dinero perteneciente a la Fundación Bambino Gesù, dinero del que podían disponer debido a las funciones que tenían». «En detalle, se han pagado para fines totalmente extra institucionales 422.005,16 euros utilizados para las obras de reestructuración de un edificio propiedad del Governatorato vaticano y destinado a la residencia del secretario de Estado emérito y para beneficiar a la empresa de Gianantonio Bandera».

Todo comenzó a raíz de una investigación publicada por el periodista italiano Emiliano Fittipaldi, que fue absuelto por falta de competencia territorial por el Vaticano en el proceso por la filtración y publicación de documentos reservados en su libro Avarizia.

Fitipaldi probó que una parte de la reestructuración del ático, un espacio de unos 600 metros cuadrados más otros 100 metros de terraza, al que se mudó Bertone tras ser sustituido como Secretario de Estado, fue pagada con 200.000 euros procedentes de los fondos de la Fundación Bambino Gesù, que recoge donaciones para el hospital.

Según apuntaron varios diarios locales, los 200.000 euros que costó la reforma no fueron facturados por la empresa Castelli Re, la encargada de efectuar la reestructuración del edificio, ya que quebró en julio de 2015, sino a una sociedad británica con sede en Londres, LG Concractor, controlada por el propietario de Castelli Re, Gianantonio Bandera, amigo personal de Bertone.