Manuel Martínez, de 80 años: «En mi vida no salgo del sota, caballo y rey» - Alfa y Omega

Manuel Martínez, de 80 años: «En mi vida no salgo del sota, caballo y rey»

La Fundación Amigos de los Mayores ha estrenado No me dejes solo, una película en la que «no pasa nada, por que así es la soledad: No pasa nada»

José Calderero de Aldecoa

Cuando en una película hay un plano fijo durante diez minutos en el que el protagonista solo pasea desde la ventana al sofá y viceversa, como ocurre en No me dejes solo, entonces «es una película nada comercial», como la definen sus creadores. Y si a ese plano le sigue otro, también fijo, en el que se ve a una mujer comiendo durante 15 minutos o a un hombre simplemente sentado en un sofá, menos todavía.

En No me dejes solo, que se estrenó en cine el jueves 7 de septiembre, «no hay ningún giro argumental. Ni un final increíble. Es una película en la que no pasa nada. Por que la soledad es así. No pasa nada», añaden. Y es así para más de 2 millones de personas mayores que viven solas en España, según el Instituto Nacional de Estadística. Y aunque vivir solo no es sinónimo de sentirse solo, prácticamente el 60 % —datos de Imserso-CIS—, reconoce tener sentimientos de soledad no deseada o aislamiento.

Un día en la vida de una persona mayor

No me dejes solo, que busca recaudar dinero para la Fundación Amigos de los Mayores y que ha sido posible gracias a la colaboración desinteresada del Getafe C. F., la agencia publicitaria El Ruso de Rocky, la productora Lee Films y la dirección de El Cangrejo, cuenta un día en la vida de Amelia Pérez (91 años) y Manuel Martínez (80 años). «A través de elementos tan poco cinematográficos y comerciales como el silencio, la rutina o los minutos que no pasan, la película cala en la piel y la conciencia de un público que no queda indiferente ante el problema de la soledad no deseada de las personas mayores, objetivo final de la cinta», según la Fundación Amigos de los Mayores.

«Murieron y me he quedado solo»

Manuel Martínez, protagonista de la película, es uno de los más de dos millones de ancianos que viven solos en nuestro país. Trabajó de electricista y vivía en casa con su madre y un hermano, «pero murieron y me he quedado solo», explica a Alfa y Omega.

Ahora, en su vida, no sale «del sota, caballo y rey», añade. Aunque los sábados acude Daniel, un voluntario de la Fundación Amigos de los Mayores, que «desde 2012 viene a pasar un rato conmigo. Me viene muy bien su ayuda y compañía», confiesa Martínez.

Fundación Amigos de los Mayores

La Fundación Amigos de los Mayores es una ONG de voluntariado y sin ánimo de lucro que lucha para paliar la soledad no deseada de las personas mayores. Fue fundada en Madrid en 2003 y está presente también en Pontevedra y Guipúzcoa.

«Nuestros programas de acompañamiento buscan mejorar la salud y calidad de vida de las personas mayores que se sienten solas mediante la creación de lazos afectivos con voluntarios que les ofrecen compañía, apoyo afectivo y amistad duradera», explican. En la actualidad, la fundación está inmersa en una campaña de búsqueda de voluntarios para poder aumentar el número de mayores a los que acompañan con sus programas.