Diez años dando Pan de Vida - Alfa y Omega

Diez años dando Pan de Vida

Cristina Sánchez Aguilar
El comedor del reparto nicaragüense el tercer año, ya con una cincuentena de niños

Tenía 22 años cuando el sacerdote de mi parroquia me propuso viajar a Nicaragua en verano para ayudar en la pastoral a un sacerdote amigo. El reparto William Fonseca era nuestro destino final: un barrio marginal lleno de pobreza, niños desnutridos, y una sociedad con una concepción hostil de la familia; todo esto unido al paro estructural, el alcohol, y las reyertas constantes. Pero había otra cara de la moneda: cuando amanecía, decenas de fieles de la parroquia mostraban la parte más amable de la zona. Ese verano, dimos catequesis, bautizamos a niños, confirmamos a jóvenes, se casaron por la Iglesia numerosas parejas y molestamos a las sectas que invaden los lugares donde hay gente vulnerable.

Pero necesitábamos hacer algo más. Era fundamental ayudar en el sostenimiento humanitario de la barriada. Por eso, antes de volver a España, nos vaciamos los bolsillos y, con el poco dinero que teníamos, pedimos al sacerdote y a los dos laicos colaboradores que dieran de comer a los niños con una situación más complicada.

A la vuelta a Madrid, pusimos en marcha la asociación Pan de Vida para Nicaragua, y este 2015, diez años después, hay 180 niños comiendo cada día en el comedor, 25 niños en una guardería montada para apoyar a las madres que van a trabajar a la ciudad, y 110 niños matriculados en un colegio, porque en la barriada no había opciones escolares para los niños de Secundaria.

La asociación envía unos 5.000 euros mensuales a los responsables del proyecto, sin intermediarios. Este último año se ve en apuros. Hay alrededor de 100 socios, aunque decrecen por la crisis, y se recaudan fondos a través de iniciativas como teatros, mercadillos y más. Pero el dólar se ha devaluado en Nicaragua y el mismo dinero de siempre ahora no llega para satisfacer todas las necesidades.

Más información sobre el proyecto en www.parroquia-inmaculada.es