Procesión de Domingo de Ramos: «Somos los pies de la Virgen en su paseo por las calles de Madrid» - Alfa y Omega

Procesión de Domingo de Ramos: «Somos los pies de la Virgen en su paseo por las calles de Madrid»

Ayer dio comienzo la Semana Santa y las calles de Madrid se llenan de procesiones y de fieles a su alrededor. Una de las primeras en pisar las calles de la capital es la Hermandad de los Estudiantes. Durante 5 horas las imágenes del Cristo de la Fe y del Perdón y María Santísima Inmaculada recorre las calles aledañas a la Basílica Pontificia de San Miguel y el costalero Álvaro C. se encuentra debajo de ellas

José Calderero de Aldecoa

Domingo de Ramos. Comienza la Semana Santa. Madrid se echa a la calle para ver las tradicionales procesiones, que en la capital tienen una tradición de siglos. Algunas cofradías datan del año 1.500. Por aquel entonces Madrid contaba con aproximadamente 40 hermandades.

Hoy en la capital se pueden seguir 13 procesiones, de 11 hermandades y cofradías distintas. Durante años, la primera procesión que salía a las calles de Madrid ha sido la de la Hermandad Sacramental y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Fe y del Perdón, María Santísima Inmaculada, Madre de la Iglesia y Arcángel San Miguel (Los Estudiantes) en la tarde del Domingo de Ramos.

Ayer lo volvió hacer y lo hizo después de mucha preparación. «Una vez hecha la igualá, en el mes de enero, nos reunimos los viernes para preparar la procesión. Sacamos una estructura, la parihuela, con varias planchas de acero que simulan el peso del paso», explica Álvaro C., costalero de la Hermandad. También hay una preparión espiritual, «antes de cada ensayo, rezmos un padrenuestro, un avemaría y un gloria y nos encomendamos a San Miguel, a nuestra Virgen y a nuestro Cristo. Todos pedimos: Auméntamos la fe y ten misericordia de nosotros».

El paso de la Hermandad congrega a cientos de madrileños que, en la tarde del Domingo de Ramos, se apelotonan en la calles adyacentes de la Basílica de San Miguel (Calle San Justo, 4), sede de la Hermandad.

El primer paso que sale es el de Santísimo Cristo de la Fe y del Perdón, que ve los primeros rayos del sol pasadas las siete de la tarde. Tras él, la imagen de María Santísima Inmaculada acompaña a su hijo crucificado. Debajo de los pasos hay mucho trabajo y mucha devoción. «Vamos al trabajo y tenemos que estar muy concentrados para escuchar al capataz y no perder el paso. También hay un ambiente de recogimiento, a la gente se le ve rezar. Yo suelo pedir mucho por la gente. Se alterna el silencio y el recogimiento con la comunicación constante con el capataz y los compañeros», explica.

Tras más de cinco horas de procesión, las imágenes vuelven a la Basílica. Al terminar «la sensación que te queda es agridulce. Sentimos pena porque se ha acabado nuestro Domingo de Ramos y tenemos que esperar un año entero para volver a procesionar. Por otro lado sentimos una profunda alegría por el trabajo bien hecho, por haber ayudado a la gente a rezar y por ser los pies de la Virgen en su paseo por las calles de Madrid», concluye Álvaro C.

La Hermandad de los Estudiantes volvió a salir un año más y lo hizo en su 25 aniversario, después de reponer toda la candelería, que fue robada el año pasado. Al cambiar las candelas se aprovechó para fijar bien todo el paso y así poder levantar al cielo a María, que es lo propio de una imagen de la Virgen bajo palio.