El Papa subraya «el lugar esencial de la familia en la sociedad» en la apertura del EMF - Alfa y Omega

El Papa subraya «el lugar esencial de la familia en la sociedad» en la apertura del EMF

En un vídeomensaje, Francisco advirtió de que las familias «afrontan hoy muchos desafíos» y pidió que el Encuentro Mundial de las Familias «pueda ser una fuente de renovado aliento para las familias de todas partes del mundo». A los irlandeses les pidió crecer en «unidad y la reconciliación»

José Calderero de Aldecoa

El Encuentro Mundial de las Familias (EMF), que se celebra hasta el próximo domingo 26 de agosto, arrancó este martes con un vídeomensaje del Papa. En él, Francisco subrayó «el lugar esencial de la familia en la vida de la sociedad y en la edificación de un futuro mejor para los jóvenes».

Para el Pontífice, «los jóvenes son el futuro» y «es muy importante» prepararles para ello. En este cometido, Bergoglio subrayó el significativo papel de los abuelos, que representan «las raíces del pasado».

Sobre las familias, el Santo Padre advirtió que «afrontan muchos desafíos en sus esfuerzos para encarnar un amor fiel, para crecer los hijos con valores sanos y para estar en la comunidad más amplia, levadura de bondad, amor y atención recíproca».

Por ello, «espero» que el EMF «pueda ser una fuente de renovado aliento para las familias de todas partes del mundo, especialmente para aquellas que están presentes, en Dublín». Como saben, continuó el Papa, «el encuentro mundial es una celebración de la belleza del plan de Dios para la familia» y «es también una ocasión para las familias procedentes de todas partes del mundo, para encontrarse y apoyarse en el vivir su especial vocación».

Mensaje para Irlanda

Por otra parte, el Pontífice quiso aprovechar el vídeo para mandar un mensaje al pueblo irlandés, a quienes les confesó en inglés estar feliz de regresar al país. Bergoglio estuvo en Irlanda en 1980 para aprender inglés.

«Ruego, en particular, para que mi visita pueda servir para crecer la unidad y la reconciliación entre todos los fieles de Cristo, como signo de la paz duradera que es el sueño de Dios para toda la familia humana», pidió.

Antes de concluir, el Papa pidió a los fieles que rezaran para que «este encuentro sea un momento de alegría y de serenidad, una caricia del tierno amor de Jesús para todas las familias, en verdad, para todo hijo de Dios».