Así fue el viaje en avión del Papa a Dublín - Alfa y Omega

Así fue el viaje en avión del Papa a Dublín

En el saludo a los periodistas durante el vuelo hacia Dublín, Francisco dijo: «A mí me gusta estar con las familias»

Andrea Tornielli

El Papa Francisco adora los encuentros con las familias y tiene un muy buen recuerdo de Irlanda, porque vino a estudiar aquí en 1980, para practicar la lengua. Lo dijo él mismo antes de saludar uno por uno a los periodistas que lo acompañan en este su viaje a Irlanda, durante el vuelo de Alitalia de Roma hacia Dublín.

«Gracias por la compañía y gracias por haber venido. Esta será mi segunda fiesta de las familias; la primera fue en Filadelfia (en 2015, N. d. R.). ¡A mí me gusta estar con las familias! Estoy contento de este viaje».

Después Bergoglio añadió: «Hay un segundo motivo que me llega un poco al corazón, porque estuve en Irlanda hace 38 años, en 1980, por tres meses, para practicar un poco de inglés. También para mí es un bello recuerdo. Gracias por su trabajo».

Después de saludar con el micrófono a los periodistas, el Papa recorrió sin prisas el corredor del avión para saludarlos uno por uno. Recibió peticiones de oración por personas enfermas, recibió cartas y recados, le regalaron un rosario.

El camarógrafo de Rome Reports informó a Francisco sobre su inminente matrimonio. El Papa primero bromeó: «Otro…». Después le dio su bendición y pidió que le dieran dos rosarios (de los que normalmente regala a los huéspedes importantes, uno con cuentas negras para él y otro blanco para su futura esposa, que se quedó en Italia).

Al saludar a los periodistas argentinos, el Papa preguntó qué se dice en su patria, y explicó que lee la información sobre su país. En la cola del avión había un grupo de fotógrafos, cada uno llevaba una camiseta amarilla con la imagen del mural del «Superpope». Y se tomaron todos una selfie.

El episodio más curioso fue el que se vivió con Martin Bashir, director del servicio religioso de la BBC, hijo de madre hindú y padre Paquistán: hoy por la mañana, al alba, antes de salir de su hotel romano para ir al aeropuerto de Fiumicino, recibió una llamada de su mujer, desde Londres. Le comunicó una noticia que había recibido desde Hong Kong, de su hija: Bashir será abuelo.

El periodista inglés le mostró una foto con el teléfono al Papa, con su hija y su esposo, y Francisco la bendijo virtualmente, así como al niño que está por llegar. Una buena preparación para el encuentro con las familias.

Andrea Tornielli / Vatican Insider