La Semana Santa aragonesa triunfa en Cannes - Alfa y Omega

La Semana Santa aragonesa triunfa en Cannes

El documental Inmortal, un proyecto del Arzobispado de Zaragoza, logra dos premios en el festival documental corporativo y de televisión de la ciudad francesa de Cannes

Iglesia en Aragón
Los responsables de la producción de Inmortal recogen dos premios en el Festival de Cannes. Foto: Iglesia en Aragón

El cortometraje Inmortal, un proyecto del Arzobispado de Zaragoza para incentivar la religiosidad de la Semana Santa, se ha hecho con dos premios en el IX Festival Internacional Cannes Corporate & Film TV: el Delfín de Plata, único galardón en la categoría de documentales etnográficos y sociales, y el Delfín Negro, premio absoluto a la mejor música original. La ceremonia de entrega de los premios tuvo lugar el pasado 27 de septiembre en el Palm Beach Club de Cannes.

Inmortal es un cortometraje documental que nace de la voluntad del Arzobispado zaragozano, dentro de su proyecto cultural Alma Mater, de poner en valor la Semana Santa aragonesa a través de una producción que une a las personas alrededor de la pasión con la que se vive esta expresión popular de fe cristiana. «El objetivo es destacar la religiosidad para que la Semana Santa no se quede como algo únicamente patrimonial o festivo. La sociedad debe recordar el porqué de las celebraciones y todo lo que representan para las personas», explica José Antonio Calvo, portavoz del Arzobispado.

«Queremos que la Semana Santa sea auténtica y genuina, porque si no es cristiana y católica, en Aragón –como en cualquier otro lugar– no se entiende», apunta Calvo, quien destaca una doble vertiente: «Las expresiones de fe cristiana vertebran un espacio, en este caso el aragonés, y un tiempo, que es el ritmo de las celebraciones que se repiten cada año. La Semana Santa constituye el centro del calendario litúrgico, pero también ocupa el centro de la vida de muchos municipios».

Fe y tradición

Este documental ha sido rodado en Alcañiz, Alcorisa, Calanda, Híjar, Samper de Calanda y Zaragoza, y muestra la Semana Santa como un sentimiento profundamente enraizado y arraigado en nuestra tierra. En concreto, Inmortal pone de manifiesto el sentir de miles y miles de aragoneses que, a punto de comenzar cada primavera, hacen posible año tras año la celebración de la Semana Santa, que lleva implícita la fe, la tradición y la pertenencia a un territorio.

El estreno, según José Antonio Calvo, tendrá lugar en febrero de 2019. Se prevé que el cortometraje pueda visualizarse en una sala de cine de la capital aragonesa, al menos con un pase privado. Además, va a organizarse una proyección itinerante por las seis diócesis de Aragón (Zaragoza, Huesca, Jaca, Teruel y Albarracín, Tarazona y Barbastro-Monzón). El objetivo es que la obra llegue a todos los rincones de la comunidad e, incluso, pueda extenderse al resto de la geografía española.

Un momento del rodaje de Inmortal en la plaza de España de Alcañiz. Foto: Iglesia en Aragón

Con alma aragonesa

Inmortal, bajo la producción ejecutiva de Raúl Calavia y la producción de Brand in Black, ha sido escrito y dirigido por Javier Jiménez, contando con la música de Lorenzo Cortés, la fotografía y montaje de José Manuel Fandos y la voz en off de la actriz aragonesa Luisa Gavasa. El documental fue producido con las tecnologías de rodaje más avanzadas, siendo realizado en 8K.

En su producción ha participado un equipo humano de más de 60 personas, durante siete meses de trabajo. El 95 % de los profesionales son aragoneses y, salvo la grabación de la voz en off en un estudio de Madrid, todos los medios técnicos utilizados pertenecen a empresas aragonesas.

Esta es la segunda vez que un trabajo producido por Brand In Black (Raúl Calavia) en colaboración con Freeman Creación Audiovisual (Javier Jiménez) es premiado en el Cannes Corporate & Film TV. En 2016, obtuvieron un Delfín de Oro en la categoría de Museos y Centros de Visitantes con la producción Alma Mater Museum, también para el Arzobispado de Zaragoza.

Un año especial

El pasado 18 de julio se cumplieron 700 años de la firma de la bula Romanus pontifex del Papa Juan XXII, por la que Zaragoza se elevaba a la categoría de archidiócesis. Un acontecimiento especial, en palabras de su arzobispo, Vicente Jiménez Zamora, que supone «una ocasión privilegiada para dar gracias a Dios por el don y misterio de nuestra Iglesia diocesana, por pertenecer gozosamente a ella y por ser humildes trabajadores en la viña del Señor».

Junto a este mensaje espiritual, precisa Jiménez Zamora, es necesario reconocer que la elevación de la sede episcopal de Zaragoza a la dignidad de metropolitana tuvo una gran importancia para la historia del Reino y la Corona de Aragón. Inmortal se suma a esta celebración.

José María Albalad / Iglesia en Aragón