Goya vuelve a Zaragoza - Alfa y Omega

Goya vuelve a Zaragoza

La fundación Fusara expone en el palacio de Sástago buena parte de la colección Santamarca, con la serie Juegos de niños del pintor aragonés

Juan Luis Vázquez Díaz-Mayordomo
Niños jugando a soldados. Francisco de Goya, hacia 1785-1786. Foto: Diputación de Zaragoza

La Diputación Provincial de Zaragoza expone hasta el 6 de enero en el palacio de Sástago la colección Santamarca, una de las mejores –y también más desconocidas– colecciones privadas de pintura de España, hoy gestionada por la fundación diocesana madrileña Fusara. Se trata de una muestra de 98 obras entre las que destaca la serie de Goya Juegos de niños, así como tres cuadros sobre temas bíblicos de Luca Giordano.

Los seis cuadros de la serie Juegos de niños fueron pintados por Goya entre 1777 y 1785, y datan de la etapa en la que el pintor trabajaba con los cartones para tapices de la Real Fábrica de Santa Bárbara de Madrid.

Así, en la serie podemos ver Niños jugando a soldados, Niños jugando al toro, Niños jugando al balancín, Niños jugando a saltar, Niños peleándose por castañas y Niños buscando nidos. Para la historiadora del arte Janis A. Tomlinson, estos cuadros suponen una muestra de uno de los principales temas de Goya en su carrera: la brevedad de la vida y de la diversión, elemento que subraya la nostalgia por la alegría de los niños.

Resurrección de Lázaro, de Luca Giordano. Foto: Diputación de Zaragoza.

Juego de luces

En el plano de la visualidad narrativa, destaca la estructura piramidal de algunas de estas composiciones y la luz y la claridad propias de la primera época del pintor aragonés. Todavía está lejos el tenebrismo de Los desastres de la guerra, pero en la paleta del pintor ya aparecen los claroscuros que caracterizarán su obra posterior.

Junto a los cuadros de Goya, los zaragozanos podrán también contemplar numerosas pinturas de las escuelas española, flamenca, italiana y holandesa, que abarcan desde el Barroco hasta el Romanticismo y que evocan diferentes temáticas: son cuadros religiosos, mitológicos, bodegones y floreros, paisajes, cuadros de costumbres, retratos… Entre ellos destacan tres obras reseñables de la mano del pintor barroco italiano Luca Giordano, que comportan una temática bíblica: Huida a Egipto, Resurrección de san Lázaro y Cristo ante Pilatos.

Todas las obras han pasado en los últimos años por un proceso de restauración a cargo del Instituto del Patrimonio Cultural de España, ya que muchas obras presentaban roturas, craquelados, levantamientos y faltas de materia pictórica; además, algunas restauraciones anteriores habían producido en algunos cuadros una distorsión de la percepción visual de las pinturas, así como oxidaciones de barnices y destensados de los lienzos.

Niños jugando al toro. Francisco de Goya, hacia 1785-1786. Foto: Diputación de Zaragoza.

De todo ello resulta una exposición que, en palabras de Ignacio Olmos, director gerente de la Fundación Fusara, supone «el mayor hito en los cien años de historia de la fundación y en la conservación de la colección Santamarca».

Una colección que descubrir

Las 207 pinturas de la colección Santamarca son fruto de las inquietudes artísticas y estéticas del banquero y conde Bartolomé de Santamarca (1806-1874), quien adquirió durante su vida numerosas obras de pintores de siglos pasados, además de ejercer de mecenas para varios pintores contemporáneos suyos.

A su muerte, la colección pasó a manos de su hija Carlota, quien al quedar sin descendencia la donó al asilo Santamarca para niños huérfanos que ella misma había creado.

Durante la Guerra Civil, la Junta Delegada del Tesoro Artístico del Gobierno republicano se hizo con la mayor parte de la colección y la almacenó en los depósitos del Museo Arqueológico Nacional y del Museo del Prado. Aunque algunas obras se perdieron, después de la contienda la mayor parte de las obras fue devuelta al colegio y asilo, pero allí languideció durante años hasta que, en 1984, una exposición de parte de sus pinturas en el Banco Exterior de España permitió el redescubrimiento de esta excepcional colección.