Próximo proyecto en Gijón de las Siervas de los Pobres: la acogida de la vida - Alfa y Omega

Próximo proyecto en Gijón de las Siervas de los Pobres: la acogida de la vida

Las Siervas de los Pobres han cerrado la casa de Gijón y se han despedido temporalmente de la diócesis de Oviedo. Entrevistamos a María Romero, superiora general de la congregación

Archidiócesis de Oviedo

¿Cómo recuerda la despedida que les hicieron en Gijón?
La reacción de la gente ha sido impresionante. Nosotras no pensábamos hacer gran cosa, porque somos hermanas muy sencillas, y además no es una despedida para siempre, sino que sabíamos que íbamos a volver. Así que cuando nos enteramos de que vendría el Arzobispo Monseñor Jesús Sanz nos quedamos paradas, porque sabemos que tiene muchas cosas… El día de la despedida, cuando salí a leer las preces y levanté los ojos, vi la capilla abarrotada de gente. Me emocioné. La homilía del Arzobispo fue preciosa también. Tanto la parroquia de Santa Olaya como la de San Esteban nos regalaron una Virgen de Covadonga preciosa.

¿Qué relación guardan con la Compañía de Jesús?
Nos fundó un jesuita, el padre Joaquín Reina, SJ, en el año 42, con el carisma de llevar el Corazón de Cristo y atender a los pobres en sus necesidades materiales y espirituales. Yo lo resumo como «ir a todos los corazones vacíos», no sólo en lo material, sino la soledad, la falta de conocimiento del Señor… por lo tanto nuestro carisma es muy abierto y tenemos desde guarderías, casas de acogida, colegios, residencias de ancianos, centros de día, internados, y luego además hacemos visitas domiciliarias a los pobres, vamos, vemos su situación y desde ahí les ayudamos en lo que podemos, además de la atención en las parroquias.

¿Qué cambios van a tener lugar durante estos años de ausencia de la diócesis?
En Gijón teníamos tres casas. Una la hemos cedido a Cáritas para que pueda desarrollar un proyecto de acogida a familias con necesidades. De esa manera garantizamos que continúe la atención a los pobres aunque nosotros no estemos. La otra casa se va a derribar, y se va a levantar un bloque de pisos para vender, y en una parte, va a haber unos apartamentos que vamos a destinar a la acogida de madres lactantes. En ellos vivirá también la comunidad, y tendremos una capilla. Nuestra presencia continuará, con el mismo carisma, pero además, como actividad principal, nos dedicaremos a la acogida de la vida.

¿Por qué este giro hacia esta necesidad concreta?
Hemos optado por esto porque vemos que hoy en día es muy importante apoyar a las madres que tienen necesidades para que puedan dar a luz a sus hijos, y no se vean obligadas a abortar por las circunstancias. La idea principal es apoyar la vida, acompañar a las madres, que no se sientan solas, y por eso, va a ser un proyecto desde la congregación y en colaboración con Cáritas. De esta manera, podrá haber una continuidad.

¿Qué planes tienen en la Congregación próximamente?
Mientras cerramos esta casa de manera temporal y se hacen las obras, vamos a reforzar otras comunidades. Además, vamos a fundar una casa en la selva de Perú, donde están llegando muchos indígenas muy pobres y queremos atenderlos. Pero siempre nos acordaremos de esta casa de Gijón, de donde salieron muchas vocaciones asturianas.