Gentes: William Goh, arzobispo de Singapur (en Gaudium Press) - Alfa y Omega

Todos los trabajadores que colaboran en instituciones relacionadas con la Iglesia deben reunirse diariamente a orar. Si nosotros no nos evangelizamos diariamente, no tendremos celo para evangelizar a otros. Sin oración, nuestro trabajo se hace estéril y mundano, ausente de vitalidad y de alegría. Con oración, nuestra oficina es un lugar de alegría, de amor fraterno, aceptando y perdonando las fragilidades de cada uno y reconociendo los talentos del otro.