Carta circular a todos los consagrados - Alfa y Omega

Carta circular a todos los consagrados

¿Cómo volver a ese fotograma inicial, a «la alegría del momento en que Jesús me ha mirado» y me ha elegido? ¿Cómo llevar la consolación de Dios al mundo y testimoniar su misericordia? Éstas son algunas de las preguntas y reflexiones que plantea la Congregación para los Institutos de Vida Consagradas y las Sociedades de Vida Apostólica en una carta circular a los religiosos y religiosas de todo el mundo, para, siguiendo el magisterio del Papa Francisco, ayudar a preparar el Año de la Vida Consagrada, que se abrirá en noviembre

Ricardo Benjumea

No se trata tanto de un texto articulado, como de una serie de pinceladas, reflexiones, preguntas…, salpicadas de citas del Papa Francisco, para ayudar a los religiosos a preparar el Año de la Vida Consagrada. El título de la carta circular es «Alegraos…», y está firmada por el prefecto, el cardenal João Braz de Aviz, y el arzobispo secretario, el español José Rodríguez Carballo.

El texto anima a redescubrir la vocación, a «centrarse en Cristo», y a convertirle en el centro de la propia vida, para después «descentrarse», salir de uno mismo, al encuentro de los demás. «No se puede perseverar en una evangelización ferviente —ha dicho Francisco— si no se está convencido, por experiencia propia, de que no es lo mismo haber conocido a Jesús que no conocerle, no es lo mismo caminar con Él que caminar a tientas, no es lo mismo poder escucharlo que ignorar su Palabra».

De «la inquietud de la búsqueda», se pasa a «la inquietud del amor», a la misión. «El Papa Francisco nos confía a nosotros, consagrados y consagradas, esa misión», dice la carta: «encontrar al Señor, que nos consuela como una madre, y consolar al pueblo de Dios».

Otro encargo explícito dado por el Pontífice a los religiosos es «despertar al mundo». Para ello, «el Papa nos impulsa al encuentro de los hombres y mujeres de hoy a la luz de dos elementos pastorales que tienen su raíz en la novedad del Evangelio: la cercanía y el encuentro, dos modos mediante los cuales Dios mismo se ha revelado en la historia hasta la Encarnación».

«Estamos invitados a ser hombres y mujeres audaces, de frontera», añade el texto, que no sólo recurre a citas expresamente dirigidas a religiosos, sino otras muchas de especial aplicación para ayudar a los consagrados, en este año dedicado a ellos, a «renovar y cualificar nuestra vocación con alegría y pasión».

2015 es el año del V centenario de santa Teresa, gran reformadora de la vida consagrada. Es también el año —como destacó el cardenal Braz de Aviz—,de los 50 años de la publicación del decreto conciliar Perfectae caritatis sobre la renovación de la vida consagrada.

Con motivo del Año de la Vida Consagrada, según adelantó monseñor Rodríguez Carballo, la Congregación para los Institutos de Vida Consagradas y las Sociedades de Vida Apostólica está preparando varios documentos. Uno de ellos, en colaboración con la Congregación de los Obispos, revisará y actualizará la relación entre los obispos y los religiosos, reemplazando a la Instrucción Mutuae relaciones. «Ese documento fue útil en el momento, pero ahora ha quedado obsoleto», dijo el Papa en su encuentro con los superiores religiosos de noviembre, del que la revista Civiltà Cattolica ofreció una amplia crónica en enero.

Además —prosiguió Rodríguez Carballo—, por mandato del Papa, se actualizará de la instrucción Verbi Sponsa, sobre las religiosas contemplativas. Otro documento en preparación tratará de la vida y la misión de los religiosos, mientras que un cuarto abordará la cuestión de la gestión de bienes por parte de los consagrados, para ofrecer líneas y orientaciones ante diversas y a veces complejas situaciones.