La Europa que soñamos - Alfa y Omega

La Europa que soñamos

José Francisco Serrano Oceja

Europa se ha convertido en la pista por la que se desliza el drama de lo humano. La pregunta sigue siendo la misma: ¿Qué es Europa? ¿Qué necesita Europa? Cuestiones no alejadas de estas otras: ¿A quién se lo preguntamos? ¿Cuál es la relación entre Europa y el periodismo que se practica en esta geografía política de los deseos?

Para obtener la respuesta adecuada, podemos volver la mirada a la historia, que nos ofrece un criterio y una respuesta sobre lo que es Europa, sobre sus raíces, sobre sus procesos, sobre sus retos. Necesario todo, pero no suficiente. Podemos preguntar a los políticos que manejan los hilos de las decisiones europeas; podemos preguntar a los burócratas de las instituciones europeas, que no hacen más que enviar mensajes de aburrimiento; podemos preguntar también a los ciudadanos, que asisten perplejos a ese deseo siempre insatisfecho de una Europa unida que se tensiona a través de los intereses nacionales. Y, como hace este libro, podemos preguntar a los periodistas, corresponsales, que trabajan en la cobertura de las instituciones europeas, en Bruselas, en Luxemburgo, en Berlín. Es lo que han hecho John Lloyd y Cristina Marconi, en colaboración con el Instituto Reuters y la Universidad de Oxford, y ahora nos ofrecen.

Analizando lo que está ocurriendo estos días por la arterias de Europa, quizá tenga razón Toby Vogel, de European Voice, cuando señala que «el periodismo es un primer borrador de la Historia pero los acontecimientos fueron más importantes de lo que se esperaba y los bocetos resultaron demasiado pobres». ¿Qué responden los periodistas cuando se les pregunta por lo que hacen y dicen las instituciones europeas, el Consejo, la Comisión, el Parlamento, el Banco Central, el Tribunal de Justicia? ¿Qué dicen los editores de los principales medios de los 28 miembros del club europeo?

Una respuesta unánime ha sido que Europa necesita imágenes y drama. Frente a la complejidad del entramado institucional en el que ha terminado convirtiéndose lo que entendemos por Europa, necesitamos imágenes y relato, historias. Quizá ahora se entienda mejor lo que está ocurriendo esta semana con el éxodo más relevante en lo que llevamos de siglo. No olvidemos esa ley que existe en el periodismo, y que los anglosajones han convertido en dogma: If it bleeds it leads (cuanto más dramática es una situación, más importancia se le da). Europa, y los medios de comunicación, han despertado del largo letargo de la complejidad política de las élites, del lento ritmo de las decisiones.

Las preguntas siguen siendo las mismas. Si ser europeo significa apostar por la solidaridad y por un futuro de crecimiento en el que los beneficiarios sean todos, y no unos pocos, el modelo entre eurófilos y euroescépticos es insuficiente. De lo que se trata es de hacer que Europa tenga vida. Como dice Griselda Pastor, de la Cadena Ser, tal y como se recoge en este libro, «en lo que respecta a Europa, cuanto más explicas, menos amor inspiras». Y así nos va…

Hablemos de Europa
Autor:

John Lloyd y Cristina Marconi

Editorial:

Rialp