Doña Olga - Alfa y Omega

Doña Olga tiene 70 años, seis hijos, 18 nietos y 13 biznietos. La conozco desde mis primeros días en Tegucigalpa hace ya 23 años. Siempre ha sido una mujer muy comprometida en la comunidad de San Pedro y San Pablo. Un día recibí una llamada suya: «He visto a unos niños, vecinos míos, buscando comida en un contenedor de basura. Yo ofrezco mi casa y mi trabajo para hacerles de comer todos los días si usted me busca los alimentos».

Por entonces había un grupo de colaboradores de Las Palmas de Gran Canaria. Encontraron un centro comunal casi en desuso para prepararlo como centro infantil. Estaba construido con tablas de madera que se habían apolillado bastante. Lo pintaron con colores alegres, buscaron materiales y encontraron a una muchacha, amiga de doña Olga, que se ofrecía como cuidadora. En un par de días comenzó a funcionar el Centro Infantil Virgen del Pino. Era el año 2001.

Estos colaboradores volvieron a Las Palmas y hablaron con sus amigos. Se organizaron como grupo y buscaron ayudas. El Gobierno de Canarias financió la construcción del centro. Encontraron ayuda para su mantenimiento en el Cabildo de Gran Canaria, y los ayuntamientos de Teror, Arucas y Santa Lucía. También colaboran las parroquias de San Francisco de Asís, La Luz, Santa Isabel de Hungría, Teror, María Madre de la Iglesia y San Marcos, Cáritas Arciprestal Ciudad Alta, Cáritas de Tejeda y el grupo de ayuda al Tercer Mundo de Teror. Y los colegios León y Castillo, Saulo de Toron, Amelia Vega Monzón, García Escámez, Los Llanos, Canterbury School, además de colaboradores particulares.

El centro atiende actualmente a 163 niños de entre tres y doce años. Son elegidos entre los que tienen más dificultades en las conflictivas colonias de La Catorce de Marzo y La Popular. Allí la vida no vale mucho. Droga y delincuencia son muy habituales. Los asesinatos son bastante frecuentes.

En el centro les espera doña Olga y su amiga y colaboradora doña Marcia, que les han preparado el desayuno. Los niños juegan, aprenden, conviven… El centro está lleno de juguetes del programa Un juguete una ilusión, de Radio Nacional de España. Muñecas formidables, carritos, rompecabezas… En la tarde viene un grupo para refuerzo escolar. Estuvieron de pequeños y al salir de la escuela regresan al centro. También ayudan 38 adultos de la tercera edad. Rezan y cantan, comparten sus vidas y hacen manualidades. Doña Olga les prepara a todos sus comidas: desayunos, almuerzos, meriendas –para los ancianos, un cafecito con pan dulce–. Doña Olga hace su trabajo como si nada. Su corazón sigue rebosando amor para todos.