El ministro de Educación pone al Centro Padre Piquer de Madrid como ejemplo de «educación integradora» - Alfa y Omega

El ministro de Educación pone al Centro Padre Piquer de Madrid como ejemplo de «educación integradora»

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría y el ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, han visitado esta mañana, junto con otras autoridades, el Centro de Formación Padre Piquer, que se ha convertido en un ejemplo de Educación Inclusiva en Madrid, trabajando con menores de hasta 38 nacionalidades y culturas diferentes. El centro es propiedad de Montemadrid y está dirigido por la Compañía de Jesús (jesuitas)

Prensa jesuitas

La Vicepresidenta y el ministro han visitado dos aulas, pudiendo conversar con alumnos y profesores. En concreto, han visitado las Aulas Cooperativas Multitarea, con más de 10 años de experiencia. El director, Ángel Serrano, ha explicado que «es un aula donde no existen asignaturas ni libros de texto; las mesas y las sillas ocupan el espacio en forma de círculos, rectángulos o cuadrados; tres profesores/as participan simultáneamente en ellas; los horarios son flexibles; y 60 estudiantes aprenden a través de una mayor interacción con sus tutores, el resto del profesorado y sus propios compañeros/as». Además, dos alumnos sirios han explicado las dificultades que están teniendo sus familiares que han tenido que permanecer en su país.

Por su parte desde la ONG jesuita Entreculturas, Raquel Martín, ha explicado la labor en educación que realizan con alumnos, fundamentalmente en tres ejes: «la formación de conocimiento e información sobre las causas globales de la pobreza, hacer comprender a los jóvenes los factores que provocan la movilidad humana en este mundo complejo», la Red Solidaria de Jóvenes y el trabajo de acompañamiento y de servicio a la comunidad educativa, para demostrar juntos «que se puede trabajar la diversidad, no en clave de problema, sino en clave de enriquecimiento».

A continuación, la Vicepresidenta y el Ministro han conocido el aula de enlace, a dónde llegan los alumnos que desconocen nuestro idioma y permanecen un máximo de 9 meses hasta que se incorporan a su aula de referencia. La vicepresidenta ha saludado en chino a uno de estos alumnos que se ha presentado diciendo su nombre y el tiempo que llevaba en España. Otros compañeros de distintas procedencias (Rumanía, Filipinas, Australia…) se han presentado y se han hecho una foto con Soraya Sáenz de Santamaría.

Después de la visita el Ministro ha calificado el centro como «ejemplo notable de gran nivel educativo, aquí los niños tienen unas notas elevadas pero, sobre todo, no tienen absentismo escolar, que es muy importante, y a los niños se les ve felices, que lo más importante de todo». Ha destacado entre otros, el «aspecto inclusivo. Ver a niños de 38 nacionalidades distintas, diferentes religiones, diversas costumbres, todos siendo amigos, todos formando parte del mismo cuerpo, todos trabajando en la misma dirección. Eso es fácil decirlo, pero muy difícil hacerlo y por eso quiero recalcar la labor de los docentes», ya que éste es un «colegio que se adapta a las necesidades del entorno» y «es capaz de integrar a muchos alumnos inmigrantes, muchos niños que lo han pasado muy mal antes de llegar aquí». El ministro ha dicho salir muy impresionado de la visita: «tanto las aulas de enlace como las aulas cooperativas que hemos visto son distintas etapas en esa fase de aprendizaje que hace este colegio y, la verdad, hemos salido muy impresionados con lo que hemos visto aquí».

Crisis de refugiados

El ministro ha enmarcado la visita en la futura llegada de refugiados a Europa. «Esto tiene que ver con uno de los grandes retos que tiene en estos momentos planteado la Unión Europea ante la mayor crisis de inmigración, probablemente, de su historia reciente, Europa tiene que dar soluciones. Europa ha hecho una apuesta por acoger a todos aquellos que vienen huyendo de la guerra y España va a participar en la misma teniendo en cuenta algo que está en el artículo primero de la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, el hecho de que la dignidad humana es inviolable».

«Me ha impresionado mucho ver hoy a los docentes, a Montse y a los otros, el entusiasmo que tienen y que ponen en su tarea» ha dicho Méndez de Vigo. «Acogeremos a estos refugiados con generosidad, con afecto y con capacidad para integrarlos, y para que ellos en el futuro sean lo que quieran ser porque aquí, gracias a la educación, les daremos las herramientas necesarias para que puedan hacer lo que quieran. Gracias a colegios como Padre Piquer, podremos acometer esa tarea con eficacia, generosidad y, con algo muy importante en la vida, que es con alegría».

Ha señalado que desean que desde España se ofrezca una educación a estos niños para que luego puedan ayudar a reconstruir su país. Ha recordado que el Ministerio de Educación sigue manteniendo reuniones con diferentes representantes y es miembro de la Comisión Interministerial para este tema. Según Méndez de Vigo, además de gobierno, comunidades autónomas, y resto de administraciones, «hay que contar con los que tienen experiencia, sobre todo, y eso también es la razón de nuestra visita hoy aquí, con aquellos que saben de esto».

Ha puesto como ejemplo de trabajo al centro Padre Piquer por «saber adaptarse a las necesidades educativas de su entorno con un elevado número de alumnos inmigrantes, con necesidades especiales de compensación educativa y con culturas y costumbres completamente dispares». Asimismo, ha destacado «que la tasa de absentismo escolar sea prácticamente inexistente» y ha señalado a «padres, docentes y alumnos como los principales actores de la comunidad educativa».

Elena Rodríguez-Avial / Prensa jesuitas