Madrid forma a sus párrocos en buenas prácticas de gestión - Alfa y Omega

Madrid forma a sus párrocos en buenas prácticas de gestión

El Arzobispado imparte estos días cursos de actualización pastoral en materia de administración para seguir avanzando en transparencia económica

Ricardo Benjumea
Foto: María Pazos Carretero

Transparencia y buenas prácticas administrativas. Estos son los dos grandes objetivos que persiguen las jornadas de formación que imparte la consultora PwC (antes PricewaterhouseCoopers) en la archidiócesis de Madrid. Tras una primera sesión de trabajo el 6 de noviembre con los vicarios, delegados diocesanos y personal administrativo del Arzobispado, la convocatoria se amplió el martes a los párrocos, que asistieron acompañados de algún responsable de asuntos económicos de cada parroquia.

Un segundo grupo de sacerdotes recibirá formación el 25 de noviembre. «No es que antes hubiera mala gestión en la diócesis, pero monseñor Osoro quiere que se adapte a todo nuestro plan contable los mejores métodos y normas que están utilizando la Administración y las empresas», explica José Luis Bravo, gerente de la diócesis. Estas normas se extenderán no solo a las parroquias, sino también a «las fundaciones canónicas o civiles en las que el Arzobispado esté presente».

Una de las primeras decisiones de monseñor Carlos Osoro al llegar a Madrid hace algo más de un año fue encargar una auditoría a PwC. El nuevo arzobispo quería incorporar a la administración diocesana las mejores prácticas contables «con el objetivo de ser más transparentes», aclara Bravo. Concluida la revisión de las cuentas, se ha mantenido la relación con la auditora «para asegurar que se aplican sus recomendaciones».

Uno de los puntos en el que más insisten esas recomendaciones es la prevención del blanqueo de capitales. «Las parroquias reciben muchos donativos en efectivo, y es necesario identificar correctamente al donante para poder comprobar si ese dinero procede de actividades delictivas».

«No es algo que se nos exija por ley, pero entendíamos que debíamos hacerlo». Los cambios no están exentos de dificultades. Este tipo de normas –aclara Bravo– «no son siempre de fácil aplicación a las actividades de la Iglesia». Además, no todas las parroquias están igual de preparadas para introducir una mayor profesionalización en su contabilidad.

Las cuentas de 2014

El plan de formación de los párrocos ha coincidido con la celebración del Día de la Iglesia Diocesana, en la que, tradicionalmente, la diócesis presenta públicamente sus cuentas.

A grandes rasgos, los ingresos se mantienen. En lo que respecta a las aportaciones voluntarias a través de la casilla de la Renta –el 18 % de los ingresos– el efecto de la crisis se ha podido paliar gracias al aumento de declarantes. En cuanto a las aportaciones voluntarias de los fieles (colectas, suscripciones, herencias…), la mayor partida de ingresos, se ha producido un ligero descenso, compensado, sin embargo, «por el aumento de las colectas a Cáritas», explica José Luis Bravo. «Había que ayudar más a Cáritas y los fieles lo han entendido así».

Otro tanto ocurre en la partida de los gastos. Casi la mitad se destinó en 2014 a acciones pastorales y asistenciales. «En los años anteriores, un capítulo muy importante era la construcción de nuevas parroquias, pero el que se haya frenado ese crecimiento inmobiliario nos ha ayudado a poder destinar esos fondos a las necesidades asistenciales y pastorales», cuenta el gerente diocesano.

Incentivar las suscripciones

Para seguir avanzando en la gestión cada vez más transparente de las cuentas y para poder contar con previsiones más fiables de ingresos y gastos, la archidiócesis anima a los fieles a que «sus aportaciones sean, sobre todo, por suscripción a través de un recibo domiciliado».

Desde enero de 2015, hay nuevos incentivos fiscales para esta fórmula, según explica Jesús Bravo. Los primeros 150 euros desgravan el 75 %. El resto pasa del 25 % al 30 %, salvo que el donativo sea permanente, con un antigüedad de al menos tres años, en cuyo caso la desgravación se eleva al 35 %.

Estado de ingresos, gastos e inversiones de la archidiócesis de Madrid Año 2014

Ingresos85.722.594,39 €
Aportaciones de los fieles. Colectas, suscripciones, donativos, Cáritas parroquiales, herencias, recibido para Manos Unidas, Cáritas, DOMUND, etc.50.146.567,46 €58,50 %
Asignación Tributaria. X en la Declaración de la Renta15.491.716,84 €18,07 %
De patrimonio y otras actividades. Servicios, subvenciones y de instituciones diocesanas2.308.981,35 €2,69 %
Otros ingresos corrientes. Alquileres, financieros y actividades económicas9.421.856,29 €10,99 %
Ingresos extraordinarios. Enajenación de patrimonio y préstamos8.353.472,45 €9,74 %
Total ingresos85.722.594,39 €
Déficit del ejercicio1.363.896,41 €
TOTAL87.086.490,80 €
Gastos e inversiones87.086.490,80 €
Acciones pastorales y asistenciales. Actividades pastorales, gastos de funcionamiento y entregado para Manos Unidas, Cáritas, DOMUND, etc.41.845.104,45 €48,05 %
Retribución del clero17.855.947,52 €20,50 %
Retribución del personal seglar. Haberes y Seguridad Social1.853.545,03 €2,13 %
Centros de formación. Seminario, universidad y colegios6.653.729,30 €7,64 %
Conservación de edificios. Reparaciones y conservación de parroquias y otros edificios6.445.692,07 €7,40 %
Gastos extraordinarios. Amortización de préstamos7.478.292,36 €8,59 %
Total gastos82.132.310,73 €
Inversiones en nuevos templos4.954.180,07 €5,69 %
TOTAL87.086.490,80 €