No faltes - Alfa y Omega

No faltes

María Dolores Gamazo
Foto: Miguel Hernádez Santos

Corría el año 1947 cuando, un 7 de diciembre, en vísperas de la Inmaculada, el padre Morales, SJ, hoy en proceso de beatificación, convocó en Madrid a un grupo de unos 300 hombres para celebrar una vigilia de oración como preparación a la fiesta de la Virgen. El padre Morales fue fundador del Hogar del Empleado y, tras impartir algunas tandas de Ejercicios Espirituales, vio que era necesario que el amor a la Virgen de este grupo de hombres se expandiera en una labor de evangelización. Así se iniciaron las vigilias de la Inmaculada, que durante sus primeros cincuenta años fueron encuentros de oración para hombres. Con el tiempo se introdujeron cambios: poco a poco se fueron celebrando en más parroquias y, desde los años 70, se incorporaron los testimonios de seglares y consagrados que aportaban su experiencia de conversión.

El Palacio de los Deportes de Madrid acogió, en 1996, una solemne vigilia en el 50 aniversario de estos encuentros de oración. Aunque el fundador acababa de fallecer un par de años antes, los miembros de su familia espiritual continuaron con su tarea. Y, por ello, se lanzaron a celebrar la efeméride con un acto especial que suponía un gran reto. A pesar de que ese día se disputaba un Real Madrid–Barcelona, el Palacio de los Deportes se vio desbordado con la presencia de unas 12.000 personas. Éxito total en una apuesta en la que por primera vez se incorporaba la asistencia de la familia completa.

Desde su creación, estos encuentros han ido acompasando las necesidades de la Iglesia y de la sociedad en cada momento. En 1997 se vio que la necesidad pastoral más urgente era la familia, por lo que desde entonces se pide de manera especial por la juventud y la familia. Ese mismo año comenzaron a celebrarse vigilias en Madrid en tres templos: la catedral, la basílica de la Merced y el santuario de María Auxiliadora. Hasta hoy, la vigilia de la Inmaculada no ha parado de expandirse por toda España, por Hispanoamérica y por muy diversos países.

La oración en 700 conventos de vida contemplativa contribuye al buen éxito de estos actos marianos que cuentan con un abundante fruto de conversiones. Y en los que en los últimos años no ha faltado un mensaje del Santo Padre.

Estés donde estés, no faltes el lunes, 7 de diciembre, a tu cita con la Virgen. La juventud y la familia necesitan tu oración.