Los nuevos portavoces de Francisco - Alfa y Omega

Los nuevos portavoces de Francisco

Federico Lombardi se retira a punto de cumplir los 74 años, tras ejercer durante diez como portavoz vaticano. Toman el relevo el norteamericano Greg Burke y la española Paloma García Ovejero

Ángeles Conde Mir
Foto: REUTERS/Osservatore Romano

Pasan de hacer las preguntas a responderlas. La Oficina de Prensa de la Santa Sede se renueva con dos laicos al frente, un hombre y una mujer, ambos periodistas de sobrada y probada experiencia.

El padre Federico Lombardi se retira después de dos quinquenios de infatigable servicio en la portavocía de la Santa Sede. Lo sucede en el cargo el periodista norteamericano Greg Burke, quien desde el 1 de febrero trabajaba como vicedirector de la Oficina de Prensa en sustitución del padre Ciro Benedetti. Era, por tanto, una sucesión natural y en cierta forma esperada. Gregory Joseph Burke llegó al Vaticano en el año 2012 para el puesto de asesor de comunicación tras una dilatada carrera como corresponsal de medios como Time o Fox News. Combinaba su faceta de vaticanista con la de corresponsal en zonas de guerra. Asegura sentirse «honrado y emocionado por poder contar con la confianza del Papa». Tiene 56 años, nació en Saint Louis, Missouri, y es miembro del Opus Dei.

Pero la principal sorpresa ha sido la designación de una mujer para ocupar el puesto de vicedirectora. La designada ha sido la española Paloma García Ovejero, corresponsal de COPE en el Vaticano e Italia desde 2012. Será la primera mujer en la historia en detentar ese cargo y está llamada a ser una de esas presencias femeninas más incisivas dentro de la Iglesia. La periodista española supo de su nombramiento hace menos de una semana. Cuenta que dijo sí al Papa sin saber siquiera lo que Francisco le pedía. Un sí incondicional que refleja bien su personalidad, celo profesional y, sobre todo, su amor por la Iglesia.

García Ovejero nació en Madrid en 1975 y cuenta con 18 años de experiencia en la Cadena COPE, los últimos cuatro como corresponsal en Italia y el Vaticano, una plaza nada sencilla.

Ambos departieron con el Papa el lunes por la mañana en Casa Santa Marta. El Santo Padre recibió a García Ovejero con un «¡una gallega metida en el Vaticano!», un saludo que da cuenta de la cordialidad del encuentro. Después ambos periodistas ofrecieron unas pinceladas de las directrices que les ha marcado el Papa: fidelidad, lealtad y transparencia. Así lo explicaron durante el posterior encuentro informal en el que monseñor Dario Viganò, prefecto de la Secretaría para la Comunicación, les hizo entrega oficial de las actas con sus nombramientos, aunque no comenzarán a ejercer de facto hasta el 1 de agosto. Hasta entonces seguirá capitaneando la Oficina de Prensa el jesuita Federico Lombardi, curtido en mil batallas desde que fuera nombrado para este cargo por Benedicto XVI hace diez años. Y esas batallas no han sido baladí. Tuvo que lidiar con una situación que no se producía en la Iglesia desde hacía seis siglos y para la que nadie estaba preparado: la renuncia de un Papa. También ha superado los dos casos Vatileaks aunque, en su balance personal, él destaca que los momentos más difíciles y amargos fueron los escándalos de abusos sexuales, tanto en la era de Benedicto XVI como en la de Francisco. A ambos les ha acompañado por todo el mundo: A Benedicto XVI en 22 viajes internacionales y a Francisco en 15. El último será a Polonia con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud. La rueda de prensa del Papa en ese vuelo de regreso a Roma será la última vez que ejerza como portavoz de la Santa Sede. Ese día se apagarán los micrófonos y las cámaras para él y se encenderán para Burke y García Ovejero, dos profesionales todoterreno que seguirán los pasos de un Papa que nunca descansa para contárnoslo al resto.