El Papa reconoce el acierto de Lutero al popularizar las Escrituras - Alfa y Omega

El Papa reconoce el acierto de Lutero al popularizar las Escrituras

Entrevista de Francisco a la revista de los jesuitas suecos, Sigrum, en vísperas de su viaje a Roma para conmemorar la Reforma

RV
El Papa, en 2014 con una delegación luterana de Finlandia. Foto: AFP

«No se puede ser católico y sectario». Lo ha dicho el Papa en una entrevista concedida a la revista de los jesuitas suecos, Sigrum, junto al director de la publicación La Civiltà Cattolica, a puertas de su viaje a Suecia el próximo 31 de octubre.

El Obispo de Roma habla, entre otras cosas, de sus amistades con fieles luteranos ya desde joven y también en los tiempos del ministerio episcopal.

El periodista pregunta al Papa por la conmemoración ecuménica de los 500 años de la Reforma, organizada por la Federación Luterana Mundial y por el Pontificio Consejo para la promoción de la Unidad de los Cristianos, y los las esperanzas que tiene. El Papa responde: «A mí me viene solo la palabra acercarme» Mi esperanza y mi espera es la de acercarme más a mis hermanos y a mis hermanas. La cercanía hace bien a todos. La distancia en cambio nos hace mal. Cuando nos alejamos, nos cerramos dentro de nosotros mismos y nos convertimos en mónadas, incapaces de encontrarnos. Tomamos miedos. Es necesario aprender a transcender para el encuentro con los demás. Si no lo hacemos, también nosotros cristianos nos enfermamos con las divisiones. Mi espera es aquella de llegar a dar un paso de acercamiento, de ser más cercano a mis hermanos y a mis hermanas que viven en Suecia».

A la pregunta sobre qué podría aprender la Iglesia católica de la tradición luterana, el Papa responde: «reforma y escritura».

La primera palabra, porque al principio, más que una ruptura, Lutero quería poner un remedio a una situación difícil en la Iglesia, aunque después este gesto, también a causa de la situación política, originó un estado de separación, y no un proceso de reforma de toda la Iglesia, que en cambio es fundamental, porque la Iglesia está siempre reformada, aseguró el Papa.

La segunda palabra es «Escritura»: la Palabra de Dios. Lutero hizo un gran paso para poner la palabra de Dios en las manos de pueblo. Reforma y escritura son las dos cosas fundamentales en las que podemos profundizar de la tradición luterana.