Españoles por la vida

OVIEDO-Madrid: 446 km
«Un palizón» para frenar la tropelía

«Nos vamos a dar un madrugón espectacular, porque tenemos que salir a las 4:30 de la madrugada para llegar a tiempo, y van a ser 12 horas de viaje en un solo día, pero el sacrificio merece la pena, porque la defensa de la vida es demasiado importante como para dejarlo en manos de los políticos». Así lo dice Ángel Mario Díaz, Presidente del Foro Asturiano de la Familia, que desde hace semanas coordina el viaje que realizará un centenar de asturianos para estar presentes en el 22-N. Ángel Mario explica que «estamos preocupados por el abandono del derecho a la vida que han realizado los partidos mayoritarios, PSOE y PP, y queremos mostrarles que no estamos dispuestos a permitir que esta tropelía se consume sin lucha». Y lanza una pregunta clave: «¿Hacia dónde camina un país envejecido, con una de las menores tasas de natalidad del mundo, y que se permite el lujo de escandalizarse por sacrificar a un perro ante la sospecha de que estuviese contagiado de ébola, mientras se muestra impasible ante el sacrificio diario de más de 300 inocentes en el vientre de su madre?» Por eso, Ángel Mario explica que «los asturianos no podemos permanecer indiferentes ante el drama de 300 madres al día, a las que hemos abandonado a su suerte, diciéndoles: ¿Estás embarazada? No es problema. Yo, Estado, te financio el aborto. ¿Quieres seguir con tu embarazo? Tienes un problema, arréglate». Y concluye: «Cuando las generaciones futuras nos pregunten: Papá, abuelo, ¿qué hiciste para pararlo? El esfuerzo del 22-N nos permitirá contestar: Yo estuve allí, mostré mi disconformidad con los políticos que se negaron a defender el derecho a la vida, me pegué una paliza por mostrar que matar a un ser humano indefenso en el vientre de su madre no puede ser un derecho. La vida del ser humano está por encima de cualquier cosa, y más de unos miserables cálculos electorales».

FERROL-Madrid: 602 km
Una lección de vida para 10 hijos

Mar Dorrio es un buen ejemplo de que apostar por la vida es garantía de felicidad. Nos atiende mientras prepara sandwiches de Nocilla para sus 10 hijos, y con toda naturalidad explica que, «aunque mi marido y yo vamos a tener que salir a las tres de la madrugada para llegar a tiempo, el día 22 vamos a viajar desde Ferrol a Madrid con nuestros hijos, porque queremos defender para ellos, y con ellos, una sociedad en la que se respete algo tan lógico como el derecho a la vida». Y apunta que el 22-N «va a servir no sólo para pedir al Gobierno que cumpla su palabra, sino para romper en la calle ese mito de que todo el mundo acepta el aborto, cuando en realidad somos muchos los que defendemos la vida y estamos en contra de que unos cuantos hagan negocio con algo tan miserable como matar niños».

TERUEL-Madrid: 305 km
Las promesas están para cumplirlas

Pilar Sánchez lleva años defendiendo la vida y ayudando a las embarazadas con problemas, junto a un buen número de voluntarios de RedMadre en Teruel. Por eso, este 22-N no va a hacer una excepción, y junto a su marido y a tres de sus cuatro hijos («mis dos hijos mayores viven ahora en Valencia y sólo uno va a poder venir desde allí») va a viajar hasta Madrid, «porque, aunque mucha gente está desencantada y cree que la manifestación no va a servir para nada, porque esta vez nos ha traicionado el Gobierno que creíamos que nos iba a apoyar, si nos quedamos en casa quejándonos, es como no se solucionan los problemas». De hecho, como dice Pilar, que lleva unas cuantas semanas coordinando el viaje de medio centenar de turolenses hasta Madrid, es ese desencanto social lo que debe ser una espuela para salir a la calle el 22-N y defender que cada vida importa: «Si el Gobierno ataca el derecho a la vida, no lo hará con mi silencio. Somos muchos los que vamos a seguir luchando por defender la vida y para ayudar a las embarazadas con problemas; y como hay mucha gente que apoya la vida, tenemos que salir a la calle para exigir al Gobierno que cumpla lo que nos prometió, porque para eso le votamos. Tenemos que salir el 22-N a decirles que no se pueden echar atrás, porque nosotros no lo vamos a hacer».

MURCIA-Madrid: 398 km
60.000 millones versus 0 euros a madres

«No hay derecho a que el Gobierno se gaste 60.000 millones de euros de déficit y a una embarazada con problemas no le dé más salidas que el aborto. La gente no sabe, o no quiere saber, que cada día mueren 300 bebés a causa del aborto; que el síndrome postaborto es terrible; que la mayoría de mujeres que abortan lo hacen porque nadie les dice que hay asociaciones que les ayudan; que muchos médicos sólo dan información abortista a una embarazada con problemas económicos; y que asociaciones como RedMadre-Murcia no recibimos ni un céntimo ni ayudas de ninguna clase. La gente no sabe que, por ejemplo, en Murcia, con una Iniciativa Legislativa Popular aprobada en 2009 para defender la maternidad y un Gobierno del PP con mayoría desde hace años, las embarazadas no sólo no tienen apoyos, sino que se las despide de sus trabajos, como le ha pasado hace poco a una enfermera de un conocido hospital murciano, o mil casos similares que conozco. Si eso no son motivos de sobra para ir a Madrid el 22-N, y exprimirnos como limones para organizar 20 autobuses llenos de gente que hace un esfuerzo enorme…». Lo dice, sin perder la sonrisa en la voz, y con un entusiasmo que contagia, Chechu Romero, Presidenta de RedMadre-Murcia y que, por supuesto, estará el 22-N.

JAEN-Madrid: 331 km
¿Caso a caso? Sí, para defender la vida

A Antonio, la defensa de la vida le viene de familia. De su hermano Francisco Javier, concretamente, que nació con parálisis cerebral, se fue al cielo con 17 años a causa de su enfermedad, y le enseñó que, «durante toda su vida, fue una fuente de amor y de alegría impresionante». Por eso, Antonio se ha hecho voluntario para organizar la manifestación del 22-N y lleva semanas viajando a Madrid desde La Carolina, en Jaén, para que todo esté listo el sábado. «Cuando escucho, como excusa para defender el aborto, que hay que ver caso por caso, siempre digo que sí, que hay que ir caso por caso, pero para defender la vida siempre, porque toda vida es igual de importante en toda la circunstancia», cuenta. Además, reconoce que se ha hecho voluntario por dos motivos. Uno, «por la frustración de ver que el Gobierno anterior modificó la ley del aborto sin decir que lo haría, y ahora este Gobierno no ha querido cambiarla, aunque dijo que lo haría, así que se tiene que dar cuenta de que mucha gente pedimos a gritos un cambio». Y dos, «porque quiero que las mujeres que se estén planteando abortar, cuando vean la manifestación, aunque sea por la tele al cambiar de canal, vean que mucha gente las apoya, defendemos la vida de su hijo, y puedan replantearse su decisión para optar por la vida».