El Papa pide fortalecer la preparación al matrimonio - Alfa y Omega

El Papa pide fortalecer la preparación al matrimonio

En su discurso al Tribunal de la Rota, el Papa pide un «nuevo catecumenado» para la preparación al matrimonio «como un antídoto que impida la multiplicación de celebraciones matrimoniales nulas o inconsistentes»

Ricardo Benjumea

Francisco a defendido este sábado la necesidad de un «nuevo catecumenado» para la preparación al matrimonio, y ha pedido a la Iglesia a hacer sentir a las parejas su afecto y cercanía concreta.

En un discurso a los miembros del Tribunal de la Rota, Francisco reconoció el problema que genera la falta de fe para la preparación a este sacramento. «Una mentalidad que a menudo involucra de forma amplia y capilar, las actitudes y los comportamientos de los mismos cristianos cuya fe viene debilitada y pierde la propia originalidad de criterio interpretativo y operativo para la existencia personal, familiar y social», dijo.

En este contexto, carente de valores religiosos y de fe, «las experiencias de fe de aquellos que solicitan el matrimonio cristiano son muy diversas. Algunos participan activamente en la vida de la parroquia; otros se acercan a la misma por primera vez; algunos tienen una vida de oración también intensa; otros en cambio están guiados por un sentimiento religioso más bien genérico; a veces son personas lejanas de la fe o carentes de fe. Frente a esta situación es necesario encontrar remedios válidos», dijo, y apuntó a la necesidad de una mejor formación de los jóvenes. «Se trata de ayudar a los futuros esposos a tomar y saborear la gracia, la belleza y la alegría del verdadero amor, salvado y redimido por Jesús», aclaró.

«Acogiendo los deseos de los Padres del último Sínodo Ordinario –añadió–, es urgente actuar concretamente lo ya propuesto en la Familiaris consortio, que, así como para el bautismo de los adultos el catecumenado es parte del proceso sacramental, así también la preparación al matrimonio se convierta en parte integral de todo el procedimiento sacramental del matrimonio, como un antídoto que impida la multiplicación de celebraciones matrimoniales nulas o inconsistentes».

«Otro remedio es aquel de ayudar a los recién casados a continuar el camino en la fe y en la Iglesia también después de la celebración del matrimonio», prosiguió el Papa. «Es necesario individualizar, con coraje y creatividad, un proyecto de formación para los jóvenes esposos, con iniciativas encaminadas a una creciente consciencia del sacramento recibido. Se trata de estimularlos a considerar los diversos aspectos de la cotidiana vida de pareja, que es señal e instrumento del amor de Dios, encarnado en la historia de los hombres».

El Papa concluyó su tradicional discurso de comienzos de año a la Rota Romana asegurando que se necesita mucha valentía para casarse en los tiempos que vivimos. A quienes tienen la fuerza y la alegría de cumplir este paso tan importante, no puede faltarles el afecto y la cercanía de la Iglesia.