La alegría de la liberación que da el perdón - Alfa y Omega

La alegría de la liberación que da el perdón

Jaime Noguera Tejedor

Una novela al principio dura, triste, extraña y dolorosa. Luego, reconfortante y lenta como un vals tocado y bailado despacio.

Poco a poco, vas conociendo las peculiaridades de las comunidades judías ladovitas, que sirven al autor para comunicar la vida que le viene de serie en el nombre que escogió (perdonad el enigma, pero es parte del juego).

Nos adentra la novela en el sinsentido del tener razón sin comprender al otro; en el reto de la libertad y en la disciplina, docilidad y dulzura del amor. Y en la esencia del perdón. Sólo así se puede superar el egoísmo, la cerrazón del poder que da el dinero, y el rótulo del fin sin sentido. Los hijos explican a los padres que les quieren; el futuro se abre a la sustancia del no tengo razón. Nada mejor que un pintor vanguardista que se expresa con el dominio de la técnica y la libertad del arte. Mejor dibujante que pintor (ahí su don, captar el alma de lo que ve, sin capturarla), comparte lo que tiene y no le da valor de más. Es el regalo de su coherencia lo que le hace ser amado. ¿Por qué un judío pintó crucifixiones? Léete esta novela. Y reza, como él.

El don de Asher Lev
Autor:

Chaim Potok

Editorial:

Ediciones Encuentro